Si los mayores son de cristal y más flojos que un muelle de guita, como decimos en esta tierra, los futbolistas del filial responden a una buena planificación y aguantan el tirón sin pasar por la sala médica.
Tan cerca y tan lejos. Dos equipos que trabajan en el mismo escenario y con los mismos medios y servicios médicos separados por un abismo.
En el club ya saben todo lo que ha pasado y está sucediendo con las lesiones. Basta hablar con el doctor Ripoll y con los preparadores físicos. Todo se sabe.
Pero el tema ya no es buscar culpables tanto como encontrar jugadores sanos para competir al nivel que les pide Lucas Alcaraz.
Los futbolistas de Fran están como motos y los de Lucas como muelles (de guita) que no se les puede forzar porque se rompen.
Mejor que Lucas Alcaraz les ponga vídeos y les meta en el gimnasio y que Fran Fernández le preste tantos futbolistas como exige el reglamento para competir.
A tenor de como está la primera plantilla hay que considerar que los niños son de hierro. No hay día que no caiga uno en la primera plantilla. Son de cristal.
Los problemas en el Almería se hacen eternos.
Menos mal que entrenan hora y media, si trabajaran 8 horas mañana y tarde...
Se lesionan leyendo el AS.
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