CBM Bahía de Almería vence a Maravillas Benalmádena sufriendo

CBM Bahía de Almería (22):  Javi Cutillas, Luis Miras (4), Pablo Muñoz (6), Nicolás Martín, Alberto Bonillo, José Francisco Sances, Antonio Espada (3), José Manuel Lorenzo, José Fco. López, Ismael Safiani (1), José Ángel Rodríguez, Saúl Andrés (3), David Garrido (2), Antonio Rivera y Fafi Romera (3).

Maravillas Benalmádena (21): Miguel Ángel González, Pablo Castillo, Lucas Vitale (4), Alejandro Zampalo (2), Adam Ubago, Juan Palop (4), Carlos Castillo (8), Álvaro Rodríguez, Diego González, Isaac Hervás, Antonio López, Juan Pedrosa, Alberto Arias (1), Ricardo Ávila (2) y Samuel Ferrero.

Árbitros: Manrique Romero y Molina Medina. Amonestaron a los locales Martín, Lorenzo y Romera y a los visitantes Vitale y Hervás. Excluyeron al local Muñoz y a los visitantes Vitale y Ávila.

Parciales: 2-3, 4-3, 6-4, 9-5, 14-7, 15-9 -descanso- 16-13, 17-17, 20-19, 21-20, 21-21, 22-21.

Incidencias: Partido correspondiente a la decimosexta jornada de Liga en el Grupo F la Primera División Estatal de Balonmano Masculino, disputado en el Pabellón Antonio Rivera de El Zapillo (Almería), ante unos 300 espectadores.

CBM Bahía de Almería ha logrado un importante y sufrido triunfo esta tarde en el Pabellón Antonio Rivera, frente al equipo con el que se jugó el pasado año la final andaluza de Segunda, antes del ascenso de ambos conjuntos, en un encuentro que en la primera mitad parecía encarrilado (15-9), tras una magnífica actuación local, pero que en la segunda mitad se complicó sobremanera, llegando a registrarse varios empates antes del triunfo local definitivo.

Si en la primera parte, la sensacional defensa de los de Juan Carlos Requena había dejado en nueve goles a los malagueños, en la segunda parte fue Bahía de Almería el que no pasó de los siete goles, víctima del descenso de la intensidad primero y de la precipitación y falta de acierto en la recta final.

Tras un cuarto de hora inicial de bastante igualdad, un parcial de 8-3 en diez minutos colocaba al conjunto local con el partido muy bien encarado (14-7), a falta de cinco minutos para el descanso. En esos 25 minutos, Maravillas no había pasado de siete goles y el Pabellón Antonio Rivera lo veía muy claro.

Pero tras el 15-9 del descanso, el regreso a la pista fue con otra decoración bien diferente sobre la pista, con un Bahía muy poco centrado, que apenas pudo anotar dos goles en los diez primeros minutos, por ocho de su rival, que prácticamente alcanzaba la misma cantidad en esos diez primeros minutos que en toda la primera parte.

Con el partido en empate a 17, a falta de 20 para el final, el partido prácticamente empezaba de nuevo y, a partir de ese momento, poco iba a modificarse la tónica de igualdad, que apenas dos goles como máxima diferencia, aunque siempre con Bahía de Almería siempre por delante, incluyendo en el último minuto, en el que Maravillas disfrutó de un ataque para empatar a 22, aunque la gran defensa de Bahía en ese momento lo impedía.