El día que Manolillo volvió a nacer

El doctor José María Sánchez y el también médico, Juan Callejón (entonces alcalde de El Ejido), fueron los primeros en asistir a Manuel Fernández Carrillo, conocido futbolísticamente como Manolillo.

Yo no estaba allí, pero seguí toda la información de Miguel del Pino, testigo de la fortuita lesión ocurrida en el minuto 16 de partido entre dos jugadores del Barrio de Pescadería y compañeros en el mejor Poli Almería de los ochenta. Ese día el Poli Ejido (entrenado por Juan Manuel Tartilán) ganaba 1 a 0 al Motril pero nadie se acuerda del autor del gol ni de que significó el pase a los Play Off de ascenso a Segunda B.

Inconsciente

La crónica de LA VOZ de Almería hablaba de un lance fortuito cuando chocaron las cabezas de Mané (central del Motril) y Manolillo, extremo y capitán del Poli Ejido. El jugador perdía el conocimiento y tenía sangre en la boca, lo que alarmó a los jugadores de ambos equipos que solicitaron la presencia de médico del Poli Ejido, que por entonces ya se prodigaba por los campos.

Presidiendo el partido estaba Juan Callejón Baena, alcalde de El Ejido, que se sumó a las tareas de reanimación del jugador que era trasladado en una ambulancia (llegó media hora después) a la clínica del doctor Sánchez, y tras las primeras radiografías sin lesiones graves, se optó por el traslado a Torrecárdenas para que fuese atendido con lo último en tecnología.

Aquel partido no fue normal desde el minuto de la lesión de Manolillo, ya que Godoy, otro compañero del alma de Manolillo. también militaba con Mané en el Motril.

Se perdió el Play Off

Una vez ingresado en Torrecárdenas se encargó de su recuperación el doctor Rodríguez Rojas que dejaba claro el adiós del futbolista a la liguilla de ascenso con el Poli Ejido.

Manolillo salió de Torrecárdenas semanas después y volvió a competir, pero no pudo ayudar en el ascenso de aquel Poli de Polo, Veloso, Simón, Gualda y tantos almerienses más que marcaron época junto a su capitán Manolillo.

1. La lesión eclipsó el pase del Poli a la promoción

El partido tenía un pasaporte hacia la historia al ser el equipo celeste candidato al ascenso. El choque se lo llevó por 1-o el equipo local, que terminó la Liga segundo y ascendería a Segunda B con Tartilán.

2. Mané era uno de los mejores defensas de Almería

La cabeza de Mané daba muchos goles a sus equipos por su potente salto. Era un central rocoso que daba el alma en cada balón. Manolillo y él jugaron desde niños y compartieron vestuario en el Poli Almería.

3. Veloso lo llevó en brazos hasta los vestuarios

Otro grande de Almería, pero nacido en Sevilla, el delantero Veloso, lo llevó en brazos hasta el interior del vestuario que estaba casi pegado a la línea de cal.