El más claro ejemplo de un encuentro de 0-3 claro que, por la grandeza que define a este deporte, se complica y se puede incluso perder. Puede que el mejor Unicaja Costa de Almería de la temporada no permitió apenas rechistar a un gran Melilla, el ‘equipo revelación’ por antonomasia dentro de un grupo de clubes que están dando lustro a la competición más igualada en décadas. Se manejaron a la perfección los dos primeros sets, se controló el pulso en el tercero antes de asestar con regularidad un golpe que parecía definitivo, y se ganó, pero solo en la cabeza, que no realmente en el tanteo. Se marchó del Javier Imbroda el equipo almeriense sin depositar en el piso la última pelota, y permitió que los locales rozaran la remontada en cuarto set que fue ‘montaña rusa’ y en un tie-break en el que un rebote salvó los muebles de los ahorradores, mentalmente muy tocados por la extraña situación generada.
El máximo anotador del encuentro fue el local Monfort, con 27 tantos, seguido de su compañero Martina, con 23, los mismos que Fran Iribarne, mientras que Colito mostró que ya está de vuelta, anotando 20 con unos brillantes sets iniciales, además de ser el mejor sacador, con 4 puntos directos. Eso sí, Monfort se exhibió de modo impresionante en el arranque de la cuarta manga, poniendo en jaque a los verdes y dando una renta imponente que casi no fue suficiente para los suyos. El valenciano fue el referente local una vez que creyeron poder ganar a Unicaja Costa de Almería. En bloqueo, un arma inédita durante demasiado tiempo, igualaron Fran Iribarne y Maximiliano Scarpin con tres puntos cada uno, en un choque que enalteció la labor defensiva hasta el extremo, primero de los verdes y después de los azulinos, a los que el propio conjunto de Manolo Berenguel revivió de una muerte por vía rápida.
Primer punto del partido, disputado y con finta final, pudo ser una señal. Bien Melilla en bloqueo y fácil en ataque, marcó una primera distancia de 3-1 que Unicaja Costa de Almería llevó hasta el 4-4 y el 5-5 con la ‘entrada’ de Colito en la asunción de la responsabilidad. A los verdes les faltaba bloqueo y algo más de intensidad defensiva en los primeros compases, mostrando claridad atacante por las puntas, sin utilizarse el centro, lo que le llevó a remolque (9-7). Ferrera metió una marcha más atrás, con Fornés igual delante, y por primera vez, tras un parcial de 0-3, a los ahorradores se les vio por delante (9-10). Melilla Sport Capital sostuvo el pulso y Colito entró en el servicio para poner dos de renta con un ace (11-13). El opuesto demostró que está de vuelta y que quiere que este sea su año, pero se perdió la ocasión de aumentar la distancia, y César López hizo el primer punto de bloqueo del choque (15-15).
A la parte decisiva se llegó con dos de renta gracias a Colito y a una falta de zaguero que luego fueron tres por dos defensas de un Ferrera extraordinario (15-18). Se fue a cuatro, tras tiempo de Salim Abdelkader, porque el opuesto también sumó desde el bloqueo (15-19). Con 16-20 solo restaba saber manejar el punto a punto, Vigil en el primer ‘primer tiempo’ para el 18-22. Los melillenses fueron de más a menos con su saque y Unicaja Costa de Almería, aupado por su gran defensa, puso cinco bolas de 0-1 que aprovechó a la primera con un ace de Charly Jiménez (19-25). El inicio de la segunda manga marcó el mismo ritmo con un 0-2 verde, Colito atacando y en defensa dando un plus, pero Melilla Sport Capital juega muy bien (2-2). Con todo, el opuesto ahorrador iba con todo y firmó su segundo ace, con Charly Jiménez para el bloqueo acto seguido, y con otro saque directo del internacional (3-7).
Abdelkader paró el partido y cortó la racha, pero el estado ‘on fire’ del opuesto era también en ataque. La marcha verde fue implacable (4-10), construyendo desde el saque también de Charly Jiménez y de la solvencia de Fran Iribarne. Era el momento clave para un Melilla que debía apretar más en servicio, más estando en su casa, y recortó dos tantos, pero Iribarne enseñó su facilidad para puntuar, ayudando Fornés en el bloqueo para un 7-13 que devolvió los seis puntos, pero más avanzado el set. Quedaba, eso sí, un largo trecho, si bien las sensaciones ahorradoras eran bastante buenas y su nivel defensivo, el mejor de toda la temporada. Se apretó el tanteo (12-15) con ataque fuera de Colito, y después se malogró la ocasión que su saque puso en bandeja, pero los locales seguían concediendo un buen número de ‘regalos’ desde su servicio (13-17).
A la veintena se llegó más apurado, haciendo valer el control del juego que se había tenido desde el inicio de set (17-20), fundamental para contrarrestar el tirón, por fin desde saque, de Scarpin. Colito buscó la esquina tras otra defensa para el 18-22 y el técnico local solicitó tiempo. Con 19-23 parecía más fácil cerrar el 0-2, aunque no se puede pensar jamás eso contra Melilla (21-23). Se perdió la primera bola de set tras disputarla, por mérito local en recepción y garra, pero no la segunda, en otro largo punto cerrado por el poderoso bloqueo de Vigil (22-25). Se planteaba una gran ocasión de poder completar un partido regular a alto nivel, además frente a un rival de enorme entidad. El inicio de la tercera manga fue de 2-0 con indecisiones en el ataque verde, que cortó Iribarne con su calidad habitual en ataque y en saque para un ace y 2-3. El pulso estaba servido, como mostraron las igualadas sucesivas. Colito se exhibió más todavía al servicio para devolver la delantera (5-6), devuelto con alto de suerte por César López, pero con una magnífica salvada con el pie para impedir que Melilla se marchara acto seguido. Se siguió avanzando entre igualadas, con Unicaja Costa de Almería llevando la iniciativa (10-11 con un enorme ataque de Fornés), cediéndola a Melilla (12-11 con ace de Monfort). El ‘marcaje’ entre ambos le ganaba a la espectacularidad, juego más ‘encorsetado’, parecía que esperando a los puntos calientes (15-15). Fornés colocó a la espalda porque Ignacio había sido el defensor, e Iribarne destapó el tarro de las esencias, jugadón seguido de dos más para un 15-19 desde el saque de un Vigil que incluso defendió con una plancha. El técnico local pidió tiempo, pero el nivel ahorrador parecía inapelable, aunque por la indecisión no se mató el final (20-21 tras 16-20 y un 18-21 con tiempo de Berenguel).
Riganti hizo otro ace para nivelar, increíble. Un error de ataque lo puso por detrás en el 21-22, y Monfort se sacó de la manga el 23-21 y el 24-22. Fornés anuló por el centro el primero, pero no se pudo con el segundo. Unicaja Costa de Almería regaló a Melilla una ocasión de oro de manera incomprensible. Lo que había faltado en los locales, el saque, le dio vida, y quedaba por ver cómo iba a sentar en los verdes eso de haberse visto ganadores. El 3-1 inicial hizo que se produjera el primer cambio en los verdes, Palharini por Charly, mientras que Monfort sacaba obuses para el 5-1 y tiempo de Manolo, que no cortó la racha del valenciano para el 7-1. Unicaja Costa de Almería estaba muerto y Berenguel agotó tiempos con el 8-1. La racha de Javier Monfort iba camino de ser histórica (9-1), y Colito la cortó para un punto vital desde el que saber sufrir. Todo pasaba por regresar al pabellón tras irse con un 0-3 que solo fue real en la mente, que no en el marcador.
Un 11-3 es mucho para remontar, sobre todo cuando no se saben aprovechar las ocasiones de recortar más la desventaja (12-5), si bien hay calidad sobrada para no contemplarlo (12-8). También depende mucho de lo que haga el adversario, Melilla, solvente, liderado por Monfort (15-9). Colito se inventó el 15-11, pero faltaba firmeza en el bloqueo y no se aprovechó quitar a la primera del saque a Monfort. El 17-12 se vio como la última ocasión, o al menos así lo estimó Salim Abdelkader, que pidió tiempo. Melilla defendió muchísimo más que hasta el momento, con Colito al saque para poner a los suyos a tres y hacer que el técnico local también agotara tiempos (17-14). Error de pie en saque para el 19-15 y error en ataque para el 20-15, pareció no haber manera de impedir el tie-break, pero al menos sí de ‘resetearse’ para al menos lograr la victoria de dos puntos. Otra vez a tres (21-18), último tren con saque de Ignacio, que hizo un ace para el 21-19.
El aspecto del set se tornó entonces parecido al anterior, pero a la inversa, aunque se empeñó el equipo ahorrador en cometer errores casi absurdos (23-19). Ataque de Fornés, defensa de Ferrera para ataque de Charly y 23-21, con ace de Iribarne para 23-22 y error de Martina para un 23-23 otra vez increíble, pero al revés. Por el centro atacó Melilla para tener bola de tie-break, erró el saque y Monfort hizo el 25-24 para meterse el mismo en el saque. Unicaja Costa de Almería atacó por pipe y recibió bloqueo para verse abocado al quinto set. El arranque del desempate fue de los peores en mente de cualquiera, malogrando una defensa, recibiendo un ace y con un jugador decisivo del adversario mostrando galones (3-0). Berenguel solicitó tiempo y su equipo reaccionó, Mario recibiendo perfecto el saque de Monfort (4-3).
El servicio de Scarpin, no obstante, provocó incidencia y el mejor nivel local no se vio acompañado por lo esperado en Unicaja (7-3 y 8-4 al cambio de lado). Se logró tensar el marcador con 9-7 y 10-8, pero no más allá mientras que Melilla se acercó a la victoria, siendo determinante el 11-9 de Iribarne, entrando al servicio él mismo. Tampoco sirvió, jugando perfecto el cuadro local, y sí un bloqueo de Charly para el 12-11 y un ataque del alicantino para el 13-12. Colito entró al saque y antes lo paró Abdelkader con un tiempo muerto, sabedor del poderío del opuesto internacional. A lo hecho por Melilla, nada que objetar, punto con mérito, y dos bolas de partido (14-12). Se tuvo suerte en la primera, salvada de rebote, seguida de tiempo local, y con Charly al servicio. Un error de Monfort, impensable, dio el empate, otro ataque fuera local dio bola de partido a los verdes y un error de zaguero otorgó el triunfo (14-16).
Melilla Sport Capital (2): César López (6), En Nakhai (6), Riganti (4), Monfort (27), Scarpin (14) y Martina (23), más José Osado (líbero). También jugaron Mika (-), Azme () y Anane ().
Unicaja Costa de Almería (3): Ignacio Sánchez (4), Fran Iribarne (23), Fornés (12), Colito (20), Charly Jiménez (13) y Vigil (6), más Mario Ferrera (líbero). También jugó Palharini (-).
Árbitros: Ángel Romero (Granada) y José Manuel Cherino (Toledo).
Parciales: 19-25 (21’), 22-25 (26’), 25-23 (26’), 24-26 (30’) y 14-16 (21‘).
Incidencias: Partido correspondiente a la decimosexta jornada de la SMV 2020/21 disputado en el Javier Imbroda de Melilla.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/6/deportes/207236/irse-del-javier-imbroda-antes-de-tiempo-cuesta-un-punto