Ilusión teñida de rojo y blanco en un Estadio Juan Rojas con su afición

El rugby amateur vuelve a tener público en el Estadio Juan Rojas después de más de un año con las gradas vacías, pero lo hacían con un complemento ya habitual entre los asistentes, con mascarillas, pero sin desprenderse de su intensa ilusión con este equipo que disputaba un partido decisivo ante el Jaén Rugby, el pasado domingo.

No se entiende el deporte sin público en las gradas, el regreso de los aficionados a los campos supone una gran alegría en los hogares de la ciudad de Almería tras la reciente autorización del Patronato Municipal de Deportes permitiendo la entrada de público en entrenamientos y competiciones que se celebran en todas las instalaciones deportivas. Y es que, resulta de máxima importancia el apoyo de los seguidores en la grada cuyos ánimos y aliento impulsa a que los jugadores en el terreno de juego se dejen la piel en su cita.

Joaquín Vizcaíno

Con la luz verde activada ante la entrada del público, el club Unión Rugby Almería (URA) se preparó previamente adaptándolos a las nuevas necesidades de seguridad sanitaria y dotándolos de nuevas herramientas. Con asientos asignados se marcaron las gradas con una pegatina de vinilo -una sí y tres no- y límite de aforo para 314 personas y se desinfectaron los asientos para la llegada de los aficionados. Miguel Palanca, presidente de club, ha informado que “se hicieron planos de la grada para ver cuánta gente podía tener acceso independientemente de lo marcado”.

Paralelamente a esta limpieza en el estadio de la era covid-19, desde URA han enviado un cuestionario de síntomas online destinado a los socios, invitados y público general para conocer su estado. Joaquín Vizcaíno, médico de Unión Rugby Almería, es uno de los pilares fundamentales en la institución y con la conciencia de asegurar el bienestar entre los presentes. Se encarga de llevar a cabo entre 200 test de antígenos cada semana durante el desarrollo de la liga “a cuerpo técnico, utilleros, jugadores… todas las personas que están en el campo, eso sí, excepto al público porque es imposible y por eso, hemos dimensionado el estadio, con distancias de más de metro y medio, con 314 sitios ocupados y todos ellos están nominalmente”.

Una labor estricta que, desde las 11:30 horas que se abrieron las dos puertas de acceso a las gradas en una mañana de domingo soleada, contó con la ayuda de miembros de la organización que se han encargado de participar en el meticuloso proceso: toma de temperatura, confirmación de datos de los usuarios que han rellenado el cuestionario de síntomas y asegurarse de que las personas mantengan la distancia de seguridad. Entre ellas, se encontraba Cristina Romero, miembro de la directiva URA y responsable del equipo femenino, que delegó en el campo para asegurar que se cumplan las medidas pos covid-19. “Las personas están conformes, incluso están cumpliendo rigurosamente que no se pueda fumar ni levantarse del asiento, las normas estaban claras y las han aceptado sin problema”.

El socio

Así lo ha aprobado Diego Bonilla, un socio de Unión Rugby Almería desde hace tres años que se sentó en su asiento, con una bufanda alrededor de su cuello, para arropar a los jugadores en el campo. “El coronavirus ha hecho mucho daño a los socios, no poder arropar a los jugadores es muy triste y más cuando no le podemos dar ese impulso que ellos sí nos están dando, aprovecharemos para darle todo lo que no hemos podido en la temporada”, ha indicado.

El concejal de Deportes del Ayuntamiento de Almería, Juanjo Segura, ha querido felicitar a URA, por “el excelente protocolo en el regreso del público”.

Pese a la derrota del URA ante el Jaén Rugby por 10-11, los almerienses aficionados aún están a tiempo de llenarse de ilusión y esperanza en un entorno seguro para disfrutar de un club que luchará para ascender a lo más alto con sacrificio y pasión.