Llegó al voleibol hace casi 30 años y no se imagina su vida fuera de este deporte. Empezó de colocadora en sus inicios. Espera disfrutar mucho del voleibol, pero no solo como árbitra sino también como parte de la Federación Andaluza. Ayudar para que el voleibol de Almería siga con muy buena salud es uno de sus grandes objetivos. Recuerda con emoción la final de la Copa de la Reina en Leganés con su compañera Susana Rodríguez en 2017.
¿Quién es Susana Trigo?
Una mujer que encontró en su hobby su forma de vida.
¿Cómo llega al voleibol?
Siguiendo a mi hermana en los entrenamientos de voleibol en el Colegio Azcona donde la entrenaba Moisés Ruiz siendo muy pequeña y años más tarde volviendo a reencontrarme con el voleibol en el Colegio La Salle de la mano de Francisco José Rivas ‘Cheo’ y Ángel Orellana, teniendo 15 años... empecé a jugar de central en mis inicios (hoy en día impensable) y después de colocadora, pasé por el Club Voleibol Mediterráneo y después por Univoley junto con Juan Cirera y Álex Batista, entrenando con las juveniles y senior donde llegamos a Liga FEVB en la Universidad (2ª División en esa época, actualmente sería Superliga 2).
¿Sabría vivir sin este deporte, el voleibol?
No creo, actualmente no es mi hobby, es mi trabajo.
¿Cómo fue aquel primer partido como árbitra?
Pues empecé sin titulación, echando una mano al Comité de Árbitros de Almería que lo coordinaba mi entrenador y me pidió que arbitrara los partidos que se disputaban en el Colegio La Salle, donde yo jugaba, a los equipos de categoría inferior en la Liga Municipal. A los pocos meses hice el curso de árbitro y de entrenadora con grandes profesores como es Juan Antonio Barceló, Juan Yebra y Don Pedro Segura en el Colegio Madre de la Luz en el año 1996.
¿Qué le queda por hacer en el voleibol?
Espero que mucho, empecé de jugadora, he sido entrenadora de iniciación con niños y niñas de 4 a 7 años una experiencia super gratificante empezar a enseñarles lo que es el voleibol siendo tan pequeños, soy árbitro, actualmente secretaria de la Delegación en Almería de la Federación Andaluza de Voleibol, he sido juez árbitro en Campeonatos de Andalucía y de España, también Delegada Federativa en Fases de Ascenso y Campeonatos de España.
Un pabellón especial...
El Rafael Florido porque es donde vi el voleibol de mi infancia, donde empecé a arbitrar de juez de línea y de anotadora en Superliga, donde vi grandes equipos y donde aprendí de grandes árbitros.
¿Cómo es Juan Docio?
Tranquilo, amable, conciliador y un señor esté donde esté. Es mi amigo, mi familia y mi compañero (no quiere que le diga jefe). Gracias a él el voleibol en Almería goza de muy buena salud, ya que los responsables de los clubes lo escuchan y respetan.
Encontró el amor gracias al voleibol, ¿cómo fue esa historia tan bonita?
Como otras historias, este mundo no nos deja mucho tiempo para salir del mismo entorno día a día y lo conocí en el curso de árbitros nacional del año 2002, como se dice coloquialmente le eché el ojo, fuimos coincidiendo en Campeonatos de Voleibol y Voley Playa en diferentes ciudades de España, ya que Fernando es de Las Palmas de Gran Canaria y no tuvimos un noviazgo al uso, si no que tiramos de teléfono desde el 2008 hasta el 2015 que decidimos que él viniera a vivir a Almería para formar una familia juntos.
¿Cuál el estado de salud de la cantera de voleibol en Almería? ¿Y su futuro?
El estado de salud actualmente es fantástico, desde la pandemia casi hemos duplicado el número de licencias; estamos siempre entre los primeros puestos de las clasificaciones a nivel de Selecciones Provinciales, ya que aún no han empezado los Campeonatos de Andalucía y no sabremos en qué posición quedaremos con nuestros clubes este año, pero el test de las selecciones nos dice que estamos a la cabeza de voleibol andaluz.
¿Cuántos años lleva ya ligada al voleibol?
Pues desde el año 1995 que empecé a jugar hasta hoy, han pasado casi 30 años.
Un mensaje para la familia del voleibol en Almería...
Que sigamos trabajando juntos en armonía, entendiéndonos y ayudándonos a ser más grandes como hemos ido haciendo hasta ahora y animar a más clubes que se unan a esta familia.
¿Qué le diría a un niño que quiere ser árbitro de voleibol?
Que venga a ver el voleibol desde otra perspectiva, para entenderlo y pueda conocer su deporte desde otro punto de vista. Que sea constante y disciplinado para poder llegar a ser un buen árbitro.
¿Qué le ha dado el voleibol en su vida?
Me ha dado a mi pareja que es mi vida, y mi trabajo.
¿Se ve de presidenta de algún club de voleibol?
No, ahora mismo no me lo he planteado nunca.
Un partido inolvidable... ¿y por qué?
La final de la Copa de la Reina en Leganés con mi amiga, compañera y mejor árbitro de España, Susana Rodríguez en el año 2017.
¿Qué le queda por hacer en el voleibol?
Espero todavía disfrutar mucho del voleibol, que es mi pasión; no solo como árbitra sino como parte de la Federación Andaluza de Voleibol; ayudar también para que el voleibol de Almería siga con muy buena salud y ayudar a todos los clubes de Almería a crecer dentro de mis posibilidades.
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