Esta es la historia de una pulsera de los Santos Patronos de Adra que dejó una abderitana colgada en una percha junto a la camiseta de Iker Muniain. Al capitán solo le faltaba la estola en un vestuario lleno de estampitas religiosas. Vamos, un confesionario, en una auténtica Catedral. La noticia saltó en medios nacionales y en La Voz. Ella es Sabrina Alonso Antequera (Adra 1979). Es una historia que atraviesa desde el sur al norte. Vivimos con ella su dosis diaria, la de su Athletic Club. Una “leona” de ojos verdes que ruge mientras me cuenta tomándonos un café:
“El pasado año tuve la posibilidad de ir a Bilbao a ver a mi equipo. Era el primer partido de temporada y se jugaba en “La Catedral” un Athletic Club contra el Real Madrid CF. Al día siguiente junto a mi familia, mis hermanos Antonio Alberto y Pedro, además de mi sobrina María, hicimos el tour para ver el campo, el museo y demás y fue entonces que pasando por el vestuario”…Sabrina es hermana de la Hermandad de la Virgen del Mar y San Nicolás de Tolentino y sabía de antemano de lo religioso que es el club de sus amores “porque de hecho ellos el tema del “Padre Nuestro” que ha salido ahora en televisión, eso se ha hecho de toda la vida. Yo llevaba mi pulsera de los patronos y decidí dejarla al capitán Muniain en su percha de vestuario. Era la primera pulsera que había colgada, luego pusieron otras. Conocía ese rincón sagrado lleno de estampas donde Iker rezaba antes de los partidos. A continuación le escribí, enviándole unas fotos del momento y reseñando que desde Adra (Almería) habíamos estado y que le dejaba allí la pulsera de los patronos para que le traigan suerte’. Y así fue. Iker Muniain le contestó con un: eskerrik asko (gracias).
La propia Sabrina, después, lo celebraría por partida doble con la consecución de la Copa del Rey, ese trofeo tan esperado después de 40 años, la vigesimoquinta. Para esta “leona” fue una sorpresa ver su regalo al capitán del Athletic Club por redes sociales y donde algunos medios, se hicieron eco de la noticia: “me hizo mucha ilusión porque primero fui yo quien le dejó la pulsera y seguro que ahí está. Mira, lo han tenido en cuenta, nombrar a nuestros Patronos de Adra y lo han sacado como noticia’. La columna vertebral y familiar de Sabrina es del Athletic, por derecho, lo era su abuelo Tobalo que le gustaba el Athletic de Bilbao porque solamente jugaban jugadores de la tierra. Su padre Antonio, también lo era, además de ser un apasionado del cante flamenco les dejó otro legado que era ser del equipo de San Mamés. En ese caldo de cultivo ha crecido Sabrina. Por lo tanto, en su casa todos son del Athletic Club, bueno, casi todos, me sopla que su cuñado que es de San Sebastián, es de la Real Sociedad y me confiesa que lo llevan con rivalidad sana. Sabrina se siente ‘leona’ totalmente, es de Adra, pero dice “que los vascos nacen donde quieren. A mí me ha tocado nacer en Adra, precioso pueblo del cual me siento súper orgullosa de ser abderitana pero yo, me siento ‘leona’ vasca.
Dice que no puede explicar que es ser del Athletic, le faltan calificativos ‘es un modo de vida, una religión. Un sentimiento…no te lo puedo explicar. Sin menospreciar a nadie ni a ningún equipo, pero es muy fácil ser del Madrid o del Barcelona porque son equipos que evidentemente ganan más títulos y hay mucho tema económico por ahí que ahora el fútbol es eso, la cuestión económica. Pero ser del Athletic, yo siempre digo que somos los elegidos y yo me considero una elegida’. Tiene su habitación empapelada de rojiblanco dando preferencia a un futbolista que conoció personalmente, Julen Guerrero, al que destaca de intachable por profesional y persona, agregando su humildad, honestidad y valores. Un futbolista estilista que ha dejado marcado a fuego a Sabrina para siempre.
Añade Sabrina, ‘ éste año toca alegría con la Copa pero también he tenido lágrimas Mi primer partido en vivo, también fue de Copa, asistí junto a mí hermano Antonio y el amigo Manolo Díaz -ambos, unos leones en peligro de extinción-. Fue también en Sevilla y perdimos por 4-2.” Y claro, lloraba como una enana y eso le hizo enganchar aún más al Athletic Club. Y es que Bilbao respira fútbol por los poros teniendo esa peculiaridad casi única de gozar al ver preciosas sus calles y los balcones engalanados con banderas advirtiendo que es semana de partido en San Mamés. Para Sabrina en el fútbol no existen rivales o enemigos, “tanto que cuando estuve en Sevilla en la final de la Copa, había una “Fan zone” preparada para los del Athletic y otra para el Real Mallorca. Pues bien, la de los aficionados bermellones prácticamente estaba vacía porque preferían visitar la zona de la afición del Athletic que se encontraba petada y animada con mucha diferencia. Yo les animaba a acercarse para combatir su bostezo”. Todo amor, cariño y respeto que es lo que debe imperar, porque como dice Sabrina, hay que pensar que las dos aficiones iban a disfrutar.
Posee Sabrina diez o doce camisetas de su Athletic Club, dando mucha importancia a una primera de Julen Guerrero que el propio futbolista le regaló, además de firmarla y dedicársela a la abderitana. También guarda otra firmada de Fernando Llorente. Hay que recordar que en la ciudad de Adra existen las Peñas del Real Madrid y FC Barcelona, teniendo también en su día un punto de reunión del Athletic Club que no terminó de culminarse estando situada momentáneamente en el Bar Restaurante ‘Los Gemelos del Teo’ ya que Miguel, su propietario por entonces, es también del Athletic. Allí tenían su sede. Sabrina apunta: “veíamos los partidos con buena asistencia de simpatizantes y cada uno aportaba decorado incluso proveniente de sus propios domicilios para engalanar la peña. Lo que pasó es que cuando ellos dejaron el bar para trasladarse a otro lugar, pues se decidió cancelar (no descartan de abrir sede en un futuro) la peña de alguna manera”. Es cierto añadir que aunque no esté físicamente esa Peña, sigue existiendo y funcionando, de hecho, ahora tienen un grupo de whatsApp donde se mueven a golpe de mensajes.
Sabrina se despide señalando que a los Santos Patronos de Adra, la Virgen del Mar y San Nicolás de Tolentino, ella siempre los lleva encima y cada vez que pueda los mantendrá llevándolos por tierras vascas. Desea así mismo, toda la suerte del mundo a Iker Muniain en su nueva andadura y por supuesto: ¡Aúpa Athletic!.
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