El triunfo de creer en un grupo con una media de edad muy joven para romper las barreras

Son días dulces los que se viven en estas semanas en el seno del Club Voleibol Unicaja Almería, donde la consecución de la novena Copa del Rey de su historia ha desencadenado numerosos actos de reconocimiento y visitas a diferentes instituciones como fuera la Virgen del Mar para ofrecer el título a la patrona de Almería, la Diputación Provincial para hacer lo propio a toda la provincia almeriense o ayer al Palacio de San Telmo de Sevilla donde la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, recibió a la familia ahorradora y pudo ver de primera mano los trofeos de campeón de Superliga del que los blanquiverdes son los vigentes campeones, el entorchado copero o el balón de oro del MVP del torneo del KO de Pablo Bugallo, en un acto que contó también con la presencia del director de la División de Secretaría General de Unicaja Banco, Ángel Fernández, y otros directivos y consejeros de la entidad, que también quisieron arropar al club ahorrador, donde destacaba Ramón Sedeño, su presidente, y su Junta Directiva seguido de toda la plantilla y cuerpo técnico. Todavía queda parte de la temporada por disputar, pero siempre que se consigue un título es motivo de satisfacción y de realizar un pequeño análisis sobre lo que ha significado, más teniendo en cuenta que en este 2014 se celebran los 25 años presentes en la División de Honor del voleibol español por parte de Unicaja Almería.
El máximo responsable del club no se ha cansado de repetir cuáles son los cimientos en los que en las últimas campañas se ha basado el equipo, pues el trabajo y esfuerzo diario “también tienen su base en otro compromiso, el que habla de la capacidad de la juventud”, una apuesta que parecía de locos y más en las circunstancias que ahora mismo se están atravesando, “corren tiempos difíciles para cualquier tipo de deporte, corren tiempo difíciles para la juventud”, ha estado comentando Sedeño, pues “en Unicaja Almería hemos creído en esta apuesta, en un grupo con una media de edad de solo 22 años que ha servido para romper barreras, las que ponen quienes no creen en ellos”. Por todo, el presidente tiene claro que “los jóvenes son el futuro, solo falta que le demostremos la confianza que merecen, abrirle puertas y no darles motivos para el abandono, apoyarles y no darles la espalda”.
Aunque sean 24 los títulos conquistados en un plazo de dos décadas, como bien ha estado recordando el presidente estos días, “esta Superliga y esta Copa del Rey conquistadas por novena vez tiene un sabor especial”, ya que “tanto la que se ganó el pasado 16 de febrero en Guadalajara como esta Superliga ganada en mayo eran casi tan deseadas como la primera, ganada en casa en 1995, pero no tan esperadas”. En cualquier caso, “lo de ahora ha sido una sorpresa, sorpresa que sin embargo demuestra que aún en épocas difíciles se pueden hacer las cosas bien”, afirma Sedeño, que quiere seguir apostando por esta fórmula que es algo más que una manera de hacer las cosas, es todo un símbolo.
Lejos queda el inicio de temporada, donde se perdió la Supercopa de España y los primeros partidos de Superliga, unos resultados que se han olvidado a base de esfuerzo y trabajo y claro está, obteniendo otros positivos. “El éxito se consigue teniendo a unos grandes profesionales”, afirma orgulloso el máximo responsable ahorrador, que explica que “lo que ocurrió a principio de temporada es que el equipo es muy joven, con una media de 22 años, y el comienzo de la liga y el peso que supone para jugadores que debutaban por primera vez con la c