El Tribunal Supremo ha informado en contra de que el Gobierno indulte al expresidente del Barcelona José Luis Núñez y a su hijo Josep Lluís, que pidieron el perdón del Ejecutivo a su condena a dos años y dos meses de prisión y un millón y medio de euros de multa por sobornar a inspectores de Hacienda.
El Supremo, de acuerdo al informe del fiscal, se opone al indulto porque "las condiciones personales del penado ya fueron objeto de consideración en la individualización de la pena", en referencia a la elevada edad del expresidente del Barcelona. El tribunal explica que no pretende "cuestionar" la honorabilidad del penado, pero añade que esta condición, aducida por Núñez en su solicitud, tiene una compatibilidad "problemática" con "la responsabilidad criminal" que ha llevado a su condena. "En todo caso", la supuesta honorabilidad "no merma ni hace injusta la exigencia de responsabilidad penal", añade el alto tribunal.
Núñez adujo en su solicitud, además, razones de utilidad pública, a lo que el Supremo responde que tales motivos "no se atisban en la quiebra de la efectividad de la pena, pues nada es menos útil a la sociedad que el abandono de las penas ciertas, tanto más si se hace en atención al poco igualitario criterio de relevancia social o económica del penado".
El Supremo rebajó de seis a dos años y dos meses de prisión, más el pago de una multa de 1,5 millones de euros, la condena de los Núñez.
Los dos condenados entraron en prisión, pero sólo permanecieron en ella 40 días, porque las pasadas Navidades la Generalitat les concedió el tercer grado. La Fiscalía pidió en el pasado mes de enero que se revoque ese tercer grado.
El empresario constructor y expresidente del Barcelona José Luis Núñez Clemente y su hijo, Josep Lluís Núñez Navarro, ingresaron en la prisión de Quatre Camins (Barcelona) el pasado 16 de noviembre para cumplir su condena y salieron de ella el 24 de diciembre.
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