Rubén Sellés: “En la radio de Noruega sonó Manolo Escobar por Odegaard”

Trabaja en el Stromgodset. Allí conoció a Odegaard.

—Sí. Firmé en diciembre. En 2012 estuve trabajando en un campus del Valencia en Noruega y desde entonces el que ahora es el entrenador del Stromgodset quiso ficharme. El pasado verano reiniciamos contactos y en octubre les visité y surgió la opción de venir como entrenador de campo.

—¿Cómo es Odegaard?

—Le vi desde que debutó hasta los últimos partidos. Antes de entrenarle seguí al equipo. Es zurdo, con una conducción de balón extraordinaria, una gran definición. En principio ha sido mediapunta siempre, pero al dar el salto, donde ha rendido en este equipo ha sido escorado en banda derecha. Un poco la misma posición en la que empezó Messi. Dribla hacia dentro, agrupa muchos rivales y es capaz de encontrar el pase exacto.

—¿En el Castilla hemos visto su mejor versión?

—Ha ido mejorando en cada partido. Se ha visto un poco de lo que es él.

—¿Y en lo personal?

—Es introvertido. Es muy amigo de los jugadores con los que ha crecido aquí. Está bastante centrado para la edad que tiene. Su entorno ayuda.

—¿Vio normal el tour que hizo por Europa antes de fichar por el Madrid?

—Dentro de que pueda parecer extraño, todo el mundo ha salido ganando. El jugador ha sido más conocido, el Madrid salió beneficiado porque ahora todo el mundo conoce a Odegaard. Se ha convertido en un fenómeno mediático. Todo lo que parecía negativo de ese circo ha resultado positivo. En Noruega no se habla de otra cosa.

—Le quisieron Bayern, Barça, City... ¿Eligió bien?

—Sí. Del Madrid te puedes ir al City, al Liverpool, al Barcelona, al Bayern… Pero de otros equipos dar el salto al Madrid es muy difícil.

—Para los que aún no le conocen bien, ¿con quién le podríamos comparar?

—No me gustan las comparaciones. Sería un futbolista del estilo de Messi. Tiene esa conducción de balón veloz en la que es capaz de ir driblando a rivales y definir con la pierna izquierda. Es un jugador eléctrico, que puede salir por los dos lados y tiene gol. Genera mucho para el equipo. Se me asemeja a Messi, pero dentro de eso es muy difícil llegar a ser Messi.

—¿Un futuro Balón de Oro?

—Ser un crack mundial o un Balón de Oro es muy difícil, pero las bases las tiene.

—¿Le ve al nivel del Madrid ahora mismo?

—Sí. Creo que está listo para esos minutos de formación.

—¡Más rápido que Raúl!

—Sí. Es una edad temprana, pero ya hubo jugadores que con 16 ó 17 años ya estaban en entornos profesionales.

—De momento ha jugado con el Castilla. ¿Baja mucho el nivel respecto a Noruega?

—Baja un poco. El fuerte de la formación no será al jugar con el Castilla sino entrenándose con el primer equipo. El filial le vendrá bien para adaptarse a España, pero crecerá más con los mayores. Está todo focalizado para que sea un jugador de Primera, no tiene lógica que esté mucho en Segunda B.

—¿Cómo se vivió en Noruega el fichaje de Odegaard por el Madrid?

—Fue todo un acontecimiento. Era el protagonista en los telediarios, periódicos, webs... ¡En la radio de aquí ha llegado a sonar el Que viva España de Manolo Escobar al hablar de Martin! Les gusta mucho la canción. Hay hasta una versión en noruego. Yo no entendía lo que decían, sólo la melodía (risas). Piense que Odegaard es el revulsivo para el resurgir del fútbol noruego.

—Hasta un canal noruego emite los partidos de Segunda B.

—Me dicen que sí, pero aún no lo he visto porque estamos en Turquía de pretemporada. La cobertura a Odegaard es inmediata. Es un seguimiento masivo. A mí me preguntan por las noticias de España.

—¡Es más famoso el Castilla que el propio Madrid!

—(Risas) No tanto, pero más que muchos otros equipos seguro. Y no sólo el Castilla, también sus rivales. Ya saben quién es el Amorebieta.

—¿Ha vuelto a hablar con él?

—No, pero sus compañeros sí. Cuando marcó, a los pocos minutos ya circulaban WhatsApps con el vídeo del gol. Les dice que está expectante por debutar con el primer equipo, pero que está muy feliz a las órdenes de Zidane.