Thievy tiene su estilo dentro y fuera del campo. En el césped demuestra que es uno de los jugadores más determinantes que hay en el Almería, y en sala de prensa, de los que habla sin pelos en la lengua. El congoleño reconoce que el Almería estaba atascado en fútbol y resultados, no encontraba la brújula y prácticamente no se veían capaces de ganar a nadie, tocando fondo el Sábado Santo contra el Levante en el Mediterráneo. Además, dejó claro que no se lo pasaba bien en el campo: “No sé si es por la edad o por la ansiedad, pero llegaban algunos momentos del partido en los que quería que se acabara, porque me aburría. No jugábamos a nada, no teníamos el balón”.
El delantero arrastra molestias en la rodilla y tuvo que ser tratado después del entrenamiento, pero “no es nada importante”, apuntó en la sala de prensa. Durante la sesión llevó un vendaje en la rodilla izquierda como medida de protección.
Nuevo estilo
La llegada de Sergi Barjuan ha aportado, en solo dos partidos, más dinamismo al juego del Almería, así como una mayor libertad en ataque para Thievy, que ha pasado de ser extremo a la referencia ofensiva. Le gusta el sistema que plantea el nuevo entrenador, ya que beneficia a sus cualidades: “Jugamos al toque y tenemos mucha más llegada a portería contraria. Me pongan donde me pongan lo trataré de hacer bien. Estando en el campo ya estoy feliz, pero me encanta jugar como referencia”.
Tierra de nadie
Pasaban las semanas y el Almería de JIM no ganaba. Mentalmente fue una losa que los futbolistas no podían soportar, hasta que terminó cayendo tras el 1-4 frente al Levante de Lucas Alcaraz. El propio Thievy apunta que en el vestuario había atasco futbolístico y mental: “No soy entrenador, pero no entendía por qué entrenábamos bien durante la semana y cuando llegaba el partido se nos apagaba la luz. No sé si era por miedo a perder, es una situación frustrante”.
El cambio
Cuando se habla del cambio del Almería es inevitable pensar en Javi Espinosa. El centrocampista cedido por el Villarreal aporta el equilibrio ofensivo necesario, y además gol. El que más contento está de que juegue es Thievy: “Me gusta desde que era juvenil. Es nuestro Iniesta y me alegro de que esté jugando y tenga confianza. Nos aporta cosas diferentes por su enorme calidad”.
Respecto al Rayo Vallecano, rival este domingo, hay máximo respeto en el vestuario del Almería, que está “muy unido”, porque “son muchos años con el mismo entrenador y siempre consiguen sus objetivos”, sentenció Thievy. Aunque se está acabando la Liga, la mejor versión de Thievy vuelve a aparecer con Sergi. Se siente feliz y se divierte en el campo.
Sonido SER: Thievy Bifouma, jugador del Almería.
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