La Patrona tiene a los campeones entre sus brazos

La Patrona de Almería nunca abandona a su campeones. Desde que naciera el club como Cajalmería, siempre hay flores en el camarín de la Virgen, depositadas por la familia ahorradores. Ramón Sedeño es el presidente que más veces ha visitado a la Virgen del Mar,  ya que además de hacerlo en el inicio de la temporada, suele volver con títulos que tanto gustan al Capellán. Este año ha sido especial ya que  se ha logrado la décima Superliga que convierte al Unicaja en el club más laureado de todos los tiempos en el voleibol nacional.

Tras el viaje de regreso con caras de sueño y de ilusión todos los componentes de la plantilla y la directiva en pleno se fueron con flores a María siendo el capitán, Jorge Almansa, el encargado de depositar en los brazos de la Virgen el trofeo y las flores.
Ramón Sedeño firmó en el libro de honor del Santuario como tantas veces cuando pasearon los titulos por Almería. Una tradición que se viene transmitiendo de generación en generación y que esta temporada ha cerrado un ciclo incomparable para Unicaja Almería.