La Escuela Municipal de Fútbol clausura la temporada con un mensaje contra el racismo

La grada principal del Estadio Municipal Antonio Peroles se llenó ayer (jueves, 4 de junio) para presenciar la clausura de la temporada 2014-2015 de la Escuela Municipal de Fútbol de Roquetas de Mar. En el acto participaron todos los equipos de la Escuela de las diferentes categorías, desde los potitos, nacidos en los años 2009 y 2010, hasta los infantiles. Los más de 800 alumnos de la Escuela desfilaron por el césped del Antonio Peroles para recoger su medalla ante la atenta mirada de familiares y simpatizantes, en una jornada que para los más pequeños fue inolvidable, y que transcurrió en un ambiente cercano y familiar.

La clausura contó con la presencia de destacadas personalidades del mundo del deporte, como el árbitro internacional David Fernández Borbalán, o Salva Moya, periodista deportivo de Canal Sur. También acompañaron a los alumnos los concejales en funciones del equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Roquetas de Mar: José Galdeano, María Dolores Ortega, Maite Fernández, Mari Ángeles Alcoba y José Juan Rubí, además de Pedro López Galdeano, director de la Escuela. Entre todos ellos se encargaron de entregar la medalla conmemorativa a cada uno de los alumnos de la Escuela.

Los invitados se dirigieron al público al comienzo del acto. David Fernández Borbalán, muy concienciado con apoyar este tipo de eventos de deporte base, destacó “los valores que se inculcan a los más pequeños en su formación deportiva y que van ligados a su crecimiento personal, como el compañerismo y el respeto. El trabajo que se desarrolla en las escuelas deportivas es fundamental y con el paso del tiempo apreciamos que da sus frutos”.

Salva Moya, que recientemente acaba de presentar su nuevo libro titulado Mordisco al racismo (Editorial Círculo Rojo), lanzó un mensaje contra la violencia y el racismo, y a favor de la integración a través del deporte. El título de su nuevo libro hace referencia al gesto de Dani Alves cuando en un partido, arbitrado precisamente por Fernández Borbalán, le lanzaron un plátano, y el jugador culé lo peló y le dio un mordisco en una acción que se convirtió en un alegato global contra la intolerancia.

Salva Moya explicó que “la Escuela Municipal de Fútbol de Roquetas de Mar es un claro ejemplo de cómo el deporte puede funcionar como un vehículo integrador indispensable”, y añadió que “el primer ejemplo hay que darlo desde la grada. Lamentablemente a veces escuchamos expresiones durante un partido de categorías de base que no se pueden tolerar, tenemos que erradicar de nuestro fútbol cualquier conato de violencia y racismo”.

Pedro López Galdeano dio las gracias a todas las personas que durante esta temporada han colaborado con la Escuela Municipal de Fútbol, especialmente a los padres y las madres de los alumnos. López Galdeano entregó una placa conmemorativa en nombre de la Escuela por el apoyo mostrado al concejal en funciones de Deportes del Ayuntamiento de Roquetas de Mar, José Juan Rubí, y a los invitados David Fernández Borbalán y Salva Moya.

José Juan Rubí cerró las intervenciones felicitando a David Fernández Borbalán por su impecable trayectoria, y a Salva Moya por la importante labor que está desempeñando contra el racismo. Después Rubí se dirigió a los alumnos de la Escuela, a los que dio ánimos para “seguir adelante haciendo lo que más os gusta, jugar al fútbol, siempre sin descuidar los estudios que es lo más importante, porque vosotros representáis el gran legado y el futuro de Roquetas de Mar”. Por último dio la enhorabuena a los responsables de la Escuela, y a los padres y madres por depositar su confianza en la Escuela para que sus hijos se inicien en el deporte del fútbol.

Tras la entrega de medallas y las pertinentes fotos de recuerdo, los alumnos despidieron el curso con una merienda que se convirtió en una convivencia entre la gran familia que compone la Escuela Municipal de Fútbol de Roquetas de Mar. El periodo de inscripción para el Campus de Verano ya se encuentra abierto, al igual que la preinscripción para la temporada que viene, en la que los alumnos de la Escuela seguirán haciendo lo que más les gusta: divertirse jugando al fútbol.