Los judocas almerienses de la Escuela Municipal reciben sus cinturones

Las Escuelas Municipales promovidas por el Patronato Municipal de Deportes (PMD) fomentan el deporte base desde edades muy tempranas. Gracias a ello, los pequeños alumnos del Club Mytos, que gestiona una de estas Escuelas en la capital, ya presumen de sus cinturones de judo, algunos con apenas 3 años. El pasado domingo, 14 de junio, en el Pabellón del Frontón de Andarax, tuvo lugar la entrega de los nuevos cinturones que señalan la subida de grado de estos pequeños deportistas. Casi 200 niños de entre 3 y 14 años hicieron una exhibición de todo lo aprendido durante el año y recibieron ilusionados esta nueva distinción que los anima a seguir entrenando. Más de 500 familiares y amigos acompañaron a los estudiantes en este día tan especial.

El evento, que dio comienzo a las 11 de la mañana, empezó con una exhibición de ejercicios y técnicas de nivel de judo, que iban creciendo en dificultad a medida que discurría la jornada, demostrando así la evolución de los alumnos. Casi 200 judocas demostraron su buen hacer, no solo ante unas gradas abarrotadas con más de 500 espectadores, sino también ante sus entrenadores. Miguel Ruiz, Daniel Lara, Javier San José, Javier Zurita, Miguel Ángel Rodriguez, Sergio Pallarés, Tamara Lao, Juan Francisco Martin y Juan José García son los técnicos y directivos que hacen posible el funcionamiento de esta Escuela Deportiva Municipal y que dirigieron la jornada.

Tras las exhibiciones de los diferentes alumnos se dio paso a la ceremonia de entrega de los esperados nuevos cinturones, quedando constancia así del paso de grado. Este cambio de color en sus cinturones, que varía según el nivel alcanzado, da nuevo ímpetu y motivación a los judocas que trabajan durante todo el año para seguir mejorando su técnica.

Esta distinción y el paso de un color a otro refleja el proceso de aprendizaje gradual de los niños en las diferentes técnicas de proyección e inmovilización. Con años de dedicación y práctica, el objetivo de todos estos pequeños judocas es alcanzar el cinturón negro, máximo reconocimiento y nivel de excelencia dentro de este arte marcial. Hasta entonces, los alumnos de la Escuela irán oscureciendo el color de sus cinturones con la disciplina y trabajo que el judo requiere.

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