Carolina Marín, de nuevo campeona del mundo

El volante que lanzó fuera Saina Nehwal le llevó a tenderse en la pista con lágrimas de alegría. Punto de campeonato: 21-16 y 21-19. Después de un emocionado abrazo con su entrenador, Fernando Rivas, regaló su raqueta a la zona española de la grada. Luego sonó el himno de José María Pemán, con la letra pre-constitucional, mientras se veía en lo más alto del podio. Y se le escaparon varias sonrisas, nada le hizo torcer el gesto de felicidad.

Carolina Marín conquistó su segundo oro consecutivo en el Mundial de Yakarta (Indonesia). La onubense alcanzó un hito, dos títulos seguidos, que sólo lograron antes tres jugadoras chinas: Han Aiping (1985 y 1987), Ye Zhaoying (1995 y 1997) y Xie Xingfang (2005 y 2006). Comparten plusmarca de siempre, dos coronas, con Li Lingwei (1983 y 1989). Repetir hazaña y reinar en territorio desconocido para las europeas sólo confirma la magnitud de su talento. Cada paso de Carolina en el bádminton femenino se convierte en Historia. Y con 22 años.

La final ofreció el mejor partido posible: la número uno, Marín, contra la número dos, Nehwal. La primera manga se la anotó la española gracias a su superioridad en la red, tanto de derecha como de revés. Pese a un inicio titubeante, con varios errores no forzados, Marín tomó pronto la iniciativa, machacó al cuerpo de su adversaria y abrochó el set con una sublime dejada. No le descentraron ni los toques atención de la jueza, ni dos challenges que dieron sendos puntos a Nehwal.

A Carolina le tocó remar a continuación: remontó un 6-12 con un parcial de 7-0, con dos rallies favorables que dejaron bastante tocada a la india. Ahí sacó toda su artillería: férrea defensa, globos, remates paralelos, cruzados y toques sutiles en la red. El ajustado desenlace se resolvió a favor de Marín gracias a su fortaleza psicológica y a su precisión. Pese a la derrota, Nehwal, de 25 años y bronce olímpico en Londres 2012, liderará el ránking BWF en la próxima lista del circuito, porque en 2014 cayó en cuartos.

Poco le importará a Carolina Marín. Una fractura por estrés en el quinto metatarsiano del pie derecho, que se produjo a primeros de julio, condicionó su preparación mundialista. Llegaba sin presión, para disfrutar, y se marchará con un segundo oro. “Me siento muy feliz. No pensé que con la lesión pudiera vencer, pero me machaqué con mi técnico (Rivas) y mi psicólogo (Pablo del Río) y aquí están los resultados”. Resultados históricos: doble campeona del mundo, campeona europea… y los Juegos de Río 2016 a la vuelta de la esquina.