URA - Arquitectura

Cuarto partido en casa, séptima jornada de la competición y casi 500 minutos de experiencia ante más de 80 años de historia, nueve Ligas, seis Copas del Rey y dos Copas Ibéricas. En la década de los noventa, cuando fue campeón en 1990 y 1995, Arquitectura decidió seguir siendo amateur, y este domingo se cruza en el camino ascendente de un joven club que se fragua desde la cantera y la unión que le da nombre. URA – Arquitectura, otra cita con la historia para el deporte almeriense.

La visita de los madrileños al Emilio Campra es de esos momentos esperados cuando se logra el ascenso, y Unión Rugby Almería además lo viste con una jornada rugbier pletórica en la que tras el partido de División de Honor B la fiesta continuará. Primero entrará en escena la Primera Regional con el Costa de Almería – Jaén, y después seguirá la Segunda Regional con el derbi entre hermanos El Ejido Rugby – Costa de Almería Sub-21. De nuevo la entrada al recinto será gratuita.

El rival

El espectáculo está garantizado con tres encuentros en los que se reúnen los cuatro equipos senior de la plataforma URA ocupando todas las categorías principales del rugby de manera escalonada. El plato fuerte se sirve con un Arquitectura que es “el equipo más laureado de la historia de España, que ahora está aquí porque no se ha adaptado al profesionalismo”. Pablo Jiménez, co-entrenador del XV almeriense, define al segundo en la liga como un equipo “difícil que muestra debilidad fuera”.

Toca ganar, y las claves de Unión Rugby Almería son las de “correr mucho, jugar sin miedo y ser atrevidos en abrir muchos balones”. Luego hay que “confiar en estar acertados” ante una escuadra “muy grande, muy fuerte, con muchos kilos”, que es todo lo contrario a lo que tiene URA. En ese sentido, “ganar a Granada tuvo su mérito”, y lo demuestra el 20-24 con el que perdió ante Arquitectura la semana pasada. Ese partido sirve a Jiménez para afianzar su confianza en el triunfo.
URA

El XV almeriense llega bien al choque, con la baja definitiva de Unai Bonfils, como ya se sabía, y con muchas ganas. Al pasar revista a su tropa ve que sus hombres “están fastidiados por perder tantos partidos, porque llevábamos dos años sin perder prácticamente, perder era raro, y de repente lo raro es ganar”. Eso “está pesando en el ánimo”, como reconoce Pablo Jiménez, pero acto seguido se queda con que “la gente está con muchas ganas y motivada al máximo para el partido”. 

El preparador unionista advirtió de que si no se vencía a Cisneros B en Madrid habría que rehacer las cuentas para la permanencia, y tras la derrota en el Campo Central de la Ciudad Universitaria ante una formación con casi una decena de jugadores del primer equipo madrileño, así está siendo: “para empezar, el de este domingo, que era un extra, ya no lo es, y es que ya no hay partidos extra para nosotros, puesto que hay que ganar todo lo que podamos”. Se asume el reto.