La lluvia cesó para que el Gran Poder procesionase

Toda la Almería cofrade se pasó la mañana entera mirando al cielo. Y es que la meteorología parecía querer burlarse de los sufridos cofrades: ahora llueve, ahora no, ahora chispea, ahora escampa. Fue un sinvivir que se prolongó durante la tarde ya que el tiempo seguía juguetón. 

Quien esto escribe visitó por la mañana, con los micrófonos de la Cadena SER, los tres templos de los que salían procesiones; y había unanimidad: en el Aeropuerto no nos aseguran nada. 

¿Un plan B? “Pues esperar un par de horas como mucho y, si persistiese la lluvia, un vía crucis por el interior de la iglesia y... Pero bueno, no va a llover. Nuestros Titulares no lo permitirán”. Más o menos, éste era el diálogo que manteníamos con nuestros interlocutores de Macarena, Pasión y Gran Poder en ‘Hoy por Hoy’, de Alfredo Casas.

Macarena y Pasión tienen templos cercanos donde guarecerse en caso del lluvia. Ya pasó hace una década, cuando las inclemencias meteorológicas obligaron a la procesión de bulla a refugiarse durante un par de horas en San Sebastián. Pero Gran Poder...

El larguísimo itinerario entre la iglesia de San Pío X en el Zapillo y Carrera Oficial carece de templo alguno. La carretera de Cabo de Gata es larga e inhóspita, y si salían a las calles de Almería, debían hacerlo con todas sus consecuencias.
“Tenemos preparados plásticos para el paso pero el resto de la procesión (insignias, estandarte, nazarenos) se mojaría indudablemente”, nos declaraba con pesar el buen cofrade Pepe Ruiz. 

Habría sido una pena, ya que unos 150 nazarenos tenían su papeleta de sitio sacada, el monte de claveles rojos estaba amorosamente colocado a los pies de Jesús del Gran Poder y el paso lucía como nunca, ya completamente finalizado.

Dieron las cinco de la tarde, hora taurina por antonomasia, y a causa de la lluvia, la Macarena no salió del templo de San Ildefonso a la hora estipulada.

A las 18.15 tenía que ganar las calles del barrio de Oliveros Pasión y, como la tarde seguía lluviosa, tampoco salió Jesús de Salud y Pasión desde Santa Teresa.

Ya sólo faltaba el Gran Poder, cuya salida estaba anunciada a las 19.15. Bueno, pues a esa hora ya no llovía aunque permanecía la amenaza. Macarena y Pasión habrían salido también unos minutos antes y, encomendándose a sus respectivos Titulares, las tres Cofradías estaban en la calle a las 19.15 horas.

Más gente que nunca
Podría pensarse que lo desapacible y húmedo de la ya casi noche retraería a muchos vecinos del Zapillo y la salida resultaría desangelada. Nada más lejano a la realidad. Quizá para acompañar  al Titular en unos momentos difíciles, el caso es que había más gente que nunca en la puerta de San Pío X. 

Procesión de luto, sólo se escuchaba en su discurrir el roce de las zapatillas de los 35 costaleros que calza el paso. Paso que, por cierto, ya está totalmente acabado, con la canastilla labrada completamente en los talleres de Antonio Ibáñez.

Las levantás ordenadas por el Tachuela se realizaban sin aplausos ni manifestación de ningún tipo. La procesión va sin acompañamiento musical ni se le cantan sa-etas, como procesión de luto que es.

Y la comitiva ganó paso a paso Avda. Cabo de Gata rumbo a Carrera Oficial.