Un chute de optimismo

Los almerienses tenemos cierta propensión a organizar nuestros estados de ánimo según las noticias del momento. Habitualmente despreciamos perspectivas amplias para dejarnos conducir por lo inmediato. Estos días, dos son las noticias que a algunos han conducido a la depresión. Una,  un informe de la Unión Europea, revelado por la diputada de Podemos Rosa Martínez Rodríguez, que dice que dentro de 20 años Almería será un lugar inhabitable por culpa del cambio climático, que hará inviable sus dos principales pilares económicos, la agricultura intensiva y el turismo. Digo yo que tampoco será para tanto. La otra, los datos ofrecidos por los servicios de empleo sobre el paro registrado en la provincia. Almería tiene el triste honor de ser con Huesca las dos únicas provincias peninsulares en la que el desempleo ha subido en abril respecto el mes anterior. En nuestro caso hay 1.346 parados más, el 1,92 %.
Vayamos por partes. Ya hemos repetido hasta la saciedad que el empleo estacionario de la provincia de Almería, por mor de la agricultura, tiene sus propias pautas de comportamiento. Si al dato ofrecido por el SEPE lo trasladamos al comparativo interanual veremos que ese dato no es tan malo. En abril de 2015 en Almería había 77.761 personas apuntadas al paro. Ahora, 71.371. Es el 8,22 % menos. Esto, en cuanto al dato registrado. En cuanto al paro real, que es el que ofrece la Encuesta de Población Activa (EPA), los datos son más positivos: los parados son 81.600. Hace doce meses eran 105.400. La tasa de paro en el primer trimestre del año en la provincia de Almería es del 24,39 %. Hace un año era del 30,66 %. Comparando los datos de este trimestre con el mismo trimestre de años anteriores, es la primera vez desde 2007 en que el paro en Almería se sitúa por debajo del 30 %. Y otro dato positivo: el desempleo femenino tiene en Almería un mejor comportamiento que en el resto de España. El número de mujeres desempleadas es inferior al de hombres. 8.000 menos. Esa tónica ha venido sucediendo en Almería desde hace nueve años, con la sola excepción de la segunda mitad de 2015.
Ciertamente, no es para echar las campanas al vuelo. Sean los más de 71.000 parados que dice el SEPE o los 81.000 que dice la EPA, los parados de Almería son muchos. Pero si miramos los datos de la EPA con perspectivas temporales más amplias, motivos tenemos para el optimismo. Por comparar periodos de tiempo idénticos, remontemos la vista al primer trimestre de 2013. Entonces había en Almería 135.100 parados (ahora, 81.600) y 229.100 activos (ahora, 252.800). Estamos hablando de una tasa de paro entonces del 37,11 % frente a una tasa de paro ahora del 24,39 %.