Cambiar creciendo

Verdiblanca aprovecha este equinoccio para aplicar las estrategias precisas de un cambio generacional. Pero no solo va a ser eso. La Junta Directiva que presido del proceso democrático del pasado 20 de mayo es singular: se suma veteranía, incorporación por primera vez de un socio con discapacidad intelectual (el nadador plusmarquista Carlos Tejada), dos trabajadores de las dos principales líneas de negocio comercial de nuestro centro especial de empleo ocupan cargos directivos y más de la mitad de esta nueva Junta Directiva es femenina; otra situación inédita además de que por primera vez recaen al unísono en mujeres los cargos de Vicepresidenta, Secretaria y Tesorera.
Nuestras propuestas de trabajo para este mandato se sustentan en seis ejes: transparencia y confianza, mayor participación de la masa social y de la plantilla, más cauces de comunicación interna y externa, optimización de los recursos existentes y venideros, consolidación de los servicios y negocios actuales y planificación estratégica para nuevos proyectos de acción.
Este cambio nos permitirá crecer afianzando nuestros procesos de calidad, la responsabilidad social corporativa, las acciones de igualdad de género, la administración de los recursos humanos, las relaciones con clientes y proveedores, las ofertas de licitación, los proyectos de marcado corte sociocomunitario, la búsqueda activa de empleo, las relaciones con la sociedad y la gestión de los centros de Estancia Diurna con Terapia Ocupacional ‘Juan Goytisolo’, de Fisioterapia y de Educación de Adultos.
En los últimos años he reflexionado sobre un asunto necesario de análisis y autocrítica. En Almería hay censadas unas 6.300 asociaciones de las que más de 600 son de corte social. No existen recursos públicos para tantas, salvo unas migajas paupérrimas. Esto nos hace depender agónicamente de la Administración, lo que nos resta independencia, autonomía y capacidad reivindicativa; por tanto, debemos estar preparados para más recortes. Así que debemos comenzar a diseñar estrategias de subsistencia alternativa, aunar esfuerzos y aprovechar las sinergias estructurales de las entidades.
Este va a ser el principal objetivo de Verdiblanca. Debemos mantener nuestra robustez y la seguridad que hemos conquistado en estos 36 años de vida con un extraordinario equipo técnico; con miles de asociados a los que no podemos defraudar; con casi 2.000 trabajadores que han pasado por nuestra plantilla de los que casi 500 hoy están en las provincias de Almería, Granada y Sevilla; con decenas de voluntarios que han contribuido a sobrellevar nuestras limitaciones y con nuestros familiares, amigos, vecinos y mucha gente que nos apoya y que la necesitamos para ser cada vez más grandes.