El castillo de Herodes

La Alcazaba que está en Almería no es de Almería, sino de la Junta de Sevilla. Y se cae a pedazos. ¿Sucedería lo mismo si estuviese en Sevill

Fausto Romero-Miura Giménez
22:40 • 09 jul. 2016

El 24 de noviembre de 1987, hace, pues, casi treinta años, publiqué un artículo de igual título que éste, en forma de carta abierta al entonces Delegado de Cultura de la Junta de Sevilla, mi recordado amigo José María Ortega, en el que, a propósito de la ¿restauración? de la Alcazaba, le decía: “ha decidido que nada de restaurar la Alcazaba con piedra, como la mandó construir Abd al-Rahman III, un buen día, al despertar de la siesta. No, no. La hace V.I. de cemento armado, que es el signo de los tiempos. Queda preciosa, Ilmo. Sr., y muy moderna. Y ¿ha visto lo bonitas que quedan las almenas, todas absolutamente iguales, tan prismáticas, tan perfiladas? Perfectas. Le agradeceré que me facilite la marca del molde. Es para hacer flanes en casa.- Y, además, me parece de muy buen gusto que el cemento armado lo hayan pintado de ocre porque, así, parece todavía más Castillo de Herodes… Y también me parece muy buena su idea de mojarle la oreja a Sevilla, ¡pá que se entere!, y construir una Alcazaba -¿restaurarla, reconstruirla, dice V.I.?- no, no, Ilmo. Sr., construirla de cemento antes del 92 aprovechando los restos de la Alcazaba mora. Va a quedar preciosa.”
Lo cierto, es que la Alcazaba, abandonada, se está cayendo a pedazos. ¿Sucedería lo mismo si estuviese en Córdoba, en Sevilla, en Granada?
Y digo cayendo –como si fuera ella misma la que se cae- por no decir que están atentando contra ella, como en estos días pasados con veinte taladros en sus muros –me han dicho que en presencia de un supervisor de la Junta de Sevilla, lo que convendría investigar, en lo que parece que ya está la Fiscalía pero no exime a la Junta de hacer su propia averiguación- para instalar un escenario teatral, algo que, en los años 60, se solucionaba montándolo, flotante, de madera al fondo el tercer recinto  –Lorenzo Cara, en su último libro, ha publicado una fotografía mía en la que se ve con todo detalle- para la celebración de los Festivales de España, que traían a Almería las mejores funciones. 
Entonces, la Alcazaba era el centro, el ombligo cultural de Almería: los indalianos celebraban allí sus actos de fin de curso, el Ayuntamiento organizaba cenas y bailes en Feria, había espectáculos de flamenco… ¿Conclusión? La Alcazaba se cuidaba y mantenía como una joya.
Sin embargo, el primer Ayuntamiento democrático, en 1979, decidió suprimir todos esos actos. ¿La otra conclusión? La Alcazaba se abandonó y quedó arrumbada en el casi extrarradio de la ciudad. Sólo se usaba para ser visitada.
Almería tuvo la desgracia de ser incorporada contra su voluntad a una Comunidad que no la quiere y, por ello, la tiene arrumbada en una esquina. ¿La prueba? Mírense los índices de satisfacción de los almerienses con la Junta de Sevilla: el 80% desaprobamos su (no)gestión. Y compruébese –si se puede, pues no están provincializadas- las inversiones de la Junta en las diferentes provincias, su inversión por habitante en Almería. Y no hago demagogia, pero Almería ha perdido su autonomía, la suya propia quiero decir, la de su Ayuntamiento, a pesar de que la Constitución consagra, en su artículo 140, la autonomía de los municipios. Pero ¿qué autonomía, autonomía para qué, si ha sido despojado de su Patrimonio y transferido a la Junta de Sevilla, a la que pertenece –es solo, un ejemplo- la Alcazaba que se dice de Almería pero que no es de Almería, sino que está en Almería? Es, también, en los despachos de Sevilla donde se nos dice cómo ha de ser la ciudad, rechazando el Plan General de Ordenación Urbana… ¿Y hablamos de las murallas de Jayrán, de la rehabilitación de edificio del Ayuntamiento, acordada el siglo pasado, en el año 2000? ¿Estaría así el Ayuntamiento de Sevilla? No quiero hablar de agravios pero un día contaré algunos.
¿Qué pecado irredimible ha cometido Almería: no aprobar en los dos referéndums de autonomía su incorporación a esa nueva región? Lo está pagando muy caro… y resignadamente. Sólo en las Elecciones vota distinto, más en la línea de Murcia, y muestra su descontento, pero ¿reacciona alguien, sirve para algo?
La solución a la tragedia que vive la moribunda Alcazaba según la Junta de Sevilla no es consignar una partida presupuestaria que permita la restauración rigurosa que se merece y necesita, sino, ha dicho la Consejera de Cultura, que no hablemos que es peor, pues “gracias a los rodajes cinematográficos Almería y Andalucía están en el escaparate del mundo entero” ¡Pa mear y no echar gota! 
Que seamos tontos de buenos no legitima la conducta de la Junta de Sevilla.


Aznar e Irak Blair ha confesado que se lanzó a la Guerra de Irak sin agotar las opciones pacíficas”, y que Sadam no tenía armas de destrucción masiva. Aznar lo siguió y, desde entonces, calla altaneramente. Su locura dictatorial, a la que nos opusimos el 91% de los españoles, puede que trajese como consecuencia inasumible los atentados de los trenes de Atocha: 191 fallecidos, 1.858 heridos y un cambio radical en la política de España, con el advenimiento inesperado de ZP y sus secuelas frentistas, que continúan.


Caen como moscas El Brexit lo está siendo para los políticos de G.B., que están cayendo como moscas: el país se va de Europa y ellos de sus  cargos. ¡Cojonudo, Manolín! Incluso a los vencedores: Nigel Farage, líder el UKIP; Boris Johnson, ex aspirante a Premier. Corbyn, líder laborista, ya ha sufrido una moción de censura por su tibieza.  Y el cretino homérico de Cameron, que convocó el referéndum que ha perdido, dimitió la misma noche.
La libra cae a mínimos históricos, Europa está en crisis… ¿Ha ganado alguien?




España, emparedada España ha pasado de ser campeona de Europa de fútbol a convertirse en el jamón del sándwich, aplastujada entre sus vecinos: Francia o Portugal la sucederá en el cargo.
No he visto el campeonato porque el fútbol moderno me aburre soberanamente y no soy patriota futbolero. ¡Para colmo, no vestimos de rojo sino como impone Adidas! Pero es curioso que en pleno fervorín del fútbol nórdico –Islandia, Gales y Alemania han llegado muy lejos- ha sido el fútbol del suroeste el que ha mantenido el liderazgo.


 






Temas relacionados

para ti

en destaque