PSOE y PP se deben enfrentar a sendos congresos tras el verano

Con una clara diferencia, que el del PP será a la búlgara tras la victoria y el del PSOE debe ser a cara de perro tras la derrota. Gabriel Amat, que asegura estar con las fuerzas intactas, podrá darse un baño de militantes y sonrisas, José Luis Sánchez Teruel deberá traer a Susana Díaz en un intento de que le controle las lágrimas, los llantos y el crujir de dientes de miles de militantes que buscan y necesitan una dirección de partido que les devuelva la gloria de años pasados, o por lo menos los ponga en ese camino. Lo que no sé se puede asegurar en este momento es que Susana siga apostando por un hombre que le viene perdiendo elección tras elección y que tiene al partido a muchos, demasiados puntos del mortal rival político. Gabriel Amat no se quiere ir de diputación, y es de imaginar que tampoco de la presidencia del partido, pero debe arreglar algunas cosas que se le levantan en la provincia. Hay voces que empiezan a estar no muy contentas con la labor de Javier Aureliano en el partido. Quizás hay que prometerle la presidencia de la diputación (ya sin el permiso de Eugenio Gonzálvez) en las próximas y buscar a alguien que no tenga tanto rechazo en la provincia.
Sánchez Teruel debe ir pensando en buscar no solo un relevo o dos en su ejecutiva, debe darle un vuelco casi total a la dirección de su partido (empezando por Adela Segura si se lo permite Susana) si quiere aires nuevos con los que respirar dentro del PSOE. Puestos para ofrecer no tiene muchos, pero las duplicidades de algunos de sus hombres, caso de Pérez Navas, no son de recibo en momentos como los que se viven. En este apartado de las duplicidades Gabriel también tiene mucho por hacer, y las miradas están puestas en estos momentos en Eloísa Cabrera. No puede el ayuntamiento de Roquetas tener a sus dos primeras espadas toreando en otras plazas y abandonado el coso roquetero. Deberá tomar una decisión. Se apunta que ya está buscando al sustituto de Eloísa en áreas cercanas a ondas radiofónicas y marítimas.
No son estos los únicos cambios políticos a realizar en los dos partidos (uno con aplauso y el otro con lágrimas) y tendremos tiempo de ir acercándonos a ellos si de verdad quieren ofrecer a la sociedad almeriense unos instrumentos que sirvan para la defensa de sus intereses. Y según dicen es lo único que les importa.