Descaro con código postal

El Parlamento de Andalucía ha aprobado la modificación de la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA) para legalizar unas 25.000 viviendas (la mitad de ellas en la provincia de Almería) construidas en zonas no urbanizables. El portavoz parlamentario del Grupo Socialista, Mario Jiménez, ha dicho que esta decisión aporta seguridad y tranquilidad a los propietarios y que todo el mundo debe saber que Andalucía no es -ha dicho textualmente- territorio comanche. Aunque espero que de un momento a otro las organizaciones de indigenistas y revisionistas del genocidio conquistador español pongan en su sitio a quien criminaliza de ese modo a los nativos americanos, no quiero fijarme en eso ahora. Me quedo con un detalle que, llámenme loco, no deja de llamar mi atención: en Almería se han construido en los últimos años unas 12.000 casas ilegales sin que pase nada. La mayoría en municipios del Almanzora y la mayoría en municipios gobernados por el PSOE, que es el mismo partido que controla –y de qué modo- a la Junta de Andalucía, que es la administración competente en materia de Vivienda. No sé si me pillan. Coincidirán conmigo en que no es lo mismo plantar un tipi que construir dúplex con piscina. No se tarda lo mismo. Y digo yo que alguien necesariamente habrá tenido que hacer consciente dejación de funciones para permitir que una administración tan vigilante como la Junta de Andalucía haya permitido la construcción (día a día y ladrillo a ladrillo) de cerca de 12.000 “soluciones habitacionales” en Almería, sin que pase nada. Y eso está tipificado. Vuelvan a llamarme loco, pero como hacer casas no es precisamente barato y tanto promotores como propietarios han cobrado y pagado bien por ellas, no parece muy descabellado pensar que en esas compraventas de casas al margen de la ley haya podido/debido desviarse mucho dinero. Puede que la modificación legal prescriba el delito; no lo sé. Lo que sí sé es que este monumental descaro quedará registrado para siempre. Y desde ahora con código postal.