Españolito en el mundo, te guarde Dios

Ni el candidato republicano a la presidencia de EEUU Donald Trump ni la primera ministra británica Theresa May han mencionado expresamente a España o a los emigrantes españoles. No hace falta. Están incluidos en los planes para frenar la llegada indiscriminada a sus respectivos países. En el caso británico incluso se ha acuñado ya la expresión ‘freno de emergencia’ a la entrada de emigrantes europeos por un periodo de hasta diez años. Y en cuanto a EEUU la palabra es ‘chequeo a fondo’.
Antonio Machado per­do­nará la li­cencia del tí­tulo que en­ca­beza estas lí­neas. Trata de re­flejar el am­biente irres­pi­ra­ble, es­peso y sec­tario que se está creando en los dos países an­glo­sa­jo­nes. En las úl­timas horas se han co­no­cido nuevos de­ta­lles que dan grima. Que dan pena. Que dan ra­bia. Para em­pezar por lo más le­jano: Donald Trump ha dicho en una en­tre­vista en la ca­dena NBC que cuando llegue a la Casa Blanca, que piensa lle­gar, im­pondrá un ‘control ex­tremo, un ‘chequeo a fondo’ a los ex­tran­jeros que pre­tendan en­trar en EEUU.
A unos más que otros. En es­pe­cial, a los que hayan te­nido o tengan algo que ver con el te­rro­rismo. Como los mu­sul­ma­nes. O pro­ce­dentes de países como es­tos: ‘Tenemos pro­blemas en Alemania y te­nemos pro­blemas con Francia’. Para Trump, ambos países ‘tienen la culpa’ de lo que les está pa­sando con el te­rro­rismo, porque ‘dejaron que la gente lle­gara a su te­rri­to­rio’. De modo que ‘debemos sus­pender in­me­dia­ta­mente la in­mi­gra­ción desde cual­quier país que haya es­tado com­pro­me­tido por el te­rro­rismo hasta que se es­ta­blezcan esos me­ca­nismos de con­trol’.
Chuck Todd, el pre­sen­tador del pro­grama ‘Meet the Press’, el más an­tiguo de la te­le­vi­sión nor­te­ame­ri­cana, en an­tena desde 1947, le quiso son­sacar algo más: ‘Así que Francia, Alemania, España...’.
Trump re­pitió dos veces más ‘Alemania’, otras dos veces ‘Francia’ y nin­guna ‘España’, pero sí ex­plicó su plan: ‘Si vienen de ciertas áreas, y si un per­sona no puede probar lo que tiene que pro­bar, no va a en­trar en este país’. Cuando Todd le ad­virtió de que con ese ba­remo ‘puede llegar un mo­mento en que no se va a dejar en­trar a mucha gente pro­ce­dente de mu­chos si­tios’, el mi­llo­nario in­mo­bi­liario asin­tió. ‘Puede que lle­guemos a eso’.
Y como siem­pre, para él todo es cues­tión de di­nero. Europa, la Unión Europea, nació según él ‘principalmente’ para com­petir con EEUU. Es su vi­sión mer­can­ti­lista: ‘Fíjate en Airbus; fa­brica más aviones que Boeing, ¿vale? Se unieron todos esos países para batir a EEUU’.
Más bo­ba­das. Sobre la OTAN, sa­cu­dida ya por su des­pre­cio: ‘Les es­tamos dando un viaje gratis cuando nos deben enormes can­ti­dades de di­nero, y eso que tienen el di­nero, pero no lo pa­gan, ¿y sabes por qué? Porque creen que somos es­tú­pi­dos’. Con esta mente en forma de mo­neda, lo si­guiente era de es­pe­rar: ‘Protegemos Alemania, pro­te­gemos Corea de Sur, pro­te­gemos Arabia Saudita, y per­demos siem­pre, siempre (…). Conmigo van a pa­gar’.
Y si no, esto es lo que va a ocu­rrir: ‘Lo que digo es que no están pa­gando. Si un país es in­va­dido y no han pa­gado, todo el mundo dice ‘es que te­nemos un Tratado’; claro, ello tam­bién tienen un Tratado y se su­pone que deben pa­gar; hay países en la OTAN que se están apro­ve­chando de no­so­tros; y cuando pa­guen, tendré una gran fe en la OTAN’.
Desde el Kremlin, Putin no po­dría es­cu­char estas pa­la­bras con mayor com­pla­cen­cia. No en balde se su­pone que quiere que gane Trump. Y por algo será que se ha in­ves­ti­gado la fil­tra­ción de miles de emails del par­tido de­mó­crata y pa­rece que es una ope­ra­ción rusa.