Hoy se conocen oficialmente la presidenta Díaz y el alcalde Pacheco

Han tardado más de un año, pero si el tiempo o algún problema no lo impiden, hoy se verán las caras (oficialmente) la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz y el alcalde de Almería, Ramón Fernández-Pacheco. Llega doña Susana en un momento delicado dentro de su partido, un destacado militante, don Francisco Espinosa, manifestaba hace unos días que la militancia de Almería está muy cabreada. ¿Toda la militancia, señor Espinosa? ¿Me está queriendo decir que Adela Segura, Sánchez Teruel, Gracia Fernández, Mari Carmen Ortiz o Juan Carlos Pérez Navas también están cabreados? O nos habla usted de una parte de la militancia. Esa que no ha conseguido un lugar a la derecha o a la izquierda de doña Susana, un sillón en cualquier administración y un buen sueldo a final de mes. En la historia del Partido Socialista, como en la del resto de los partidos políticos siempre ha habido una parte de la militancia cabreada, aquella que no conseguía sentarse en los bancos del poder o que veía como era despeñada por la ladera del olvido. Los partidos han estado divididos en sectores, y lo importante no era que ganara tu partido, sino que lo hiciera tu sector. Cuando el sector político del señor Espinosa estaba sentado en los bancos del poder y hacía y deshacía a su antojo, eran entonces los llamados guerristas los que andaban con un cabreo morrocotudo. Cierto que algún renovador andaba también con la mosca tras la oreja tras el engaño sufrido por los que se decían compañeros del alma. El señor Contreras nos debería contar alguna historia, por ejemplo el cómo lo dejaron caer, cuando él era el único que venía trabajando por la renovación en el PSOE en Almería. Seguiremos.
Pensando en la historia política de nuestra provincia me he olvidado de lo importante de hoy, la visita de la presidenta de la Junta al alcalde de Almería. Cortesía, buena educación y palabras de futuro. Estos actos son así. Lo necesario es que se rompa una sensación, esa que nos lleva a pensar a los almerienses que somos los olvidados de la Junta, la esquina perdida y más lejana de la vida y del poder sevillano. Y eso sólo lo puede conseguir la presidenta. No debería ser complicado hacerlo doña Susana, hoy puede ser ese día a marcar en el calendario como el primero de un tiempo mejor entre la Junta y Almería.