Un paseo ilusionante: Premios Alcazaba

Las periodistas de LA VOZ Marta Rodríguez y Lola González son las encargadas de llevar a buen puerto esta especial décima entrega, donde las actuaciones artísticas sobre las tablas del Cervantes se intercalarán con los cinco premios que componen las distinciones.
Amigos de la Alcazaba. Es una asociación provincial con trece años de trayectoria, cuyo lema radica en la defensa, difusión y disfrute de nuestro patrimonio con independencia política y económica. Con ello conforman los pilares de estos premios. Reconocer la labor de quienes trabajan a favor del patrimonio, al igual que otorgar cada año un premio negativo, se ha convertido en un referente necesario. Y así nos lo remarca Maite Pérez, presidenta de la asociación.
La primera actuación está protagonizada por la danza fusión oriental y andalusí de Rocío Rodríguez, quien fue invitada a bailar en la Biblioteca de Alejandría. El acento flamenco de su actuación queda a cargo de su cabeza y sus tacones, para dejar que la sensualidad oriental fluya por las ondas de su cuerpo y los platillos que portan sus dedos. 
El espinoso Chumbo Verde. Se empieza por lo más difícil, la entrega del galardón negativo el cual pretende señalar la lamentable situación del patrimonio almeriense y a los responsables de su situación. La presidenta alude al sentido pedagógico de esta distinción y, que sin embargo, no ha cumplido sus objetivos. Denuncia la situación en la que siguen sumidos nuestros tesoros patrimoniales, al socaire del abandono. Hablamos del Cortijo del Fraile, los Castillos de la Cala de San Pedro y los Alumbres, el Mesón Gitano, restauraciones como las del Mausoleo de Abla y las Murallas de Jayrán o el entorno de la Alcazaba. 
El galardón va a parar al delegado de Cultura, Alfredo Valdivia, por su gestión sobre el Conjunto Monumental de la Alcazaba y que AA.AA. califica de “lamentable”.  La buena noticia es que ha acudido a recogerlo. Valdivia aprovecha la ocasión para enumerar las próximas actuaciones en el recinto monumental. 
Para quitarle tensión a este primer trago se da paso a una actuación cómica a cargo de un monologuista, Marco Antonio, tras la cual yo me encuentro mucho más aterida. Empatizo con su entrada y salida: no entiendo qué hago yo aquí, con lo gañán que soy.
Primer Premio Alcazaba 2016: Educación. Va a parar al IES Celia Viñas por la labor realizada por el centro, y especialmente por el profesor del Ciclo Superior de Desarrollo de Aplicaciones Informáticas Félix Expósito, junto con el alumnado de dicho ciclo, en pro del Patrimonio Cultural de Almería. El trabajo se plasmó en 2014 con motivo de la conmemoración del Milenio de Almería en la elaboración de una magnífica página web, entre otras actividades. Recogen el galardón el director del centro, Antonio Carrillo y el profesor Félix Expósito.
El segundo Premio Alcazaba 2016: Espacios verdes. Es para la Plataforma Salvemos La Molineta, que lleva más de 10 años trabajando. La Molineta constituye un impresionante Paisaje Cultural en torno al Canal de San Indalecio. Pero aún debe asentarse como Parque Periurbano de Almería. A pesar de los avances, su futuro no está garantizado, y la próxima aprobación del nuevo PGOU hace necesario que se siga apoyando esta labor. Recogen el galardón Manuel Pérez Sola y Enrique Ruiz, quienes subrayan la importancia de cultivar el asociacionismo ciudadano en estos tiempos dominados por el fascismo y la mediocridad.
Entonces pasamos al deleite con la actuación de la cantautora almeriense Sensi Falán, con una muestra de su nuevo trabajo discográfico Vivir el verso, musicando a Goytisolo con la calidez que le es propia.
Tercer Premio Alcazaba 2016: Historia Viva. El pueblo de Padules es el merecedor del galardón por la Recreación Histórica de la Paz de las Alpujarras. Un evento que durante el 20 y 21 de mayo desde hace cuatro años reproduce la firma de la paz que puso fin a la Guerra de las Alpujarras, acontecimiento histórico acaecido en Padules en 1570. El enorme rigor histórico de todas las manifestaciones de los hechos conmemorados y la participación de todos sus habitantes ha permitido que este viaje anual en el tiempo al siglo XVI sea una cita ineludible en futuras conmemoraciones. Recogen el premio el alcalde y la teniente-alcalde del municipio de Padules, Antonio Gutiérrez y Paqui Ortiz.
Cuarto Premio Alcazaba 2016: Investigador militante. Concedido a Lorenzo Cara Barrionuevo por su labor de investigación, difusión y defensa del Patrimonio Cultural almeriense, confiriendo por tanto un grado máximo de sentido a su trabajo. Licenciado en Historia Antigua y Arqueología, cuenta con una magnífica y dilatada trayectoria investigadora plasmada en su ingente obra. Ejemplos: Historia de la Arqueología almeriense, así como la coordinación de Cuando Almería era Almaryya. Al recoger el premio Lorenzo Cara deja patente su arraigado compromiso. 
La última actuación de la noche da paso a una de las voces flamencas de Almería con más proyección. El almeriense Ezequiel Pasamontes, quien ha recorrido España y parte de Europa. Su puesta en escena corresponde a la fusión con raíz flamenca, que tantos éxitos esta prodigando a nuestros artistas. A la guitarra lo acompaña en esta ocasión El Niño de la Fragua, cuyo colofón corresponde a una sentida versión de Mediterráneo de Serrat.
Conchita Robles,  eterno glamour. Y el broche final a esta impecable gala nos la ofrece el periodista Curro Lucas con la presentación del vino espumoso denominado Conchita Robles, y que será la seña de identidad del Nuevo Cervantes. Se cumplen 95 años de la trágica muerte de la actriz almeriense, en el escenario del entonces recién nacido teatro, a manos de su exmarido, Carlos Verdugo. El equipo de Kuver Producciones, responsable actual de la gestión del teatro, ha querido materializar el glamour y calidad sobre el escenario y fuera de él, rindiéndole un merecido homenaje a una mujer libre que murió asesinada en sus tablas. Brillante. Ya no hay nada más que decir. Detrás de él se levanta el telón para dar paso a la degustación del espumoso, invitando a todo el público asistente a fusionarse con un brindis.
Me he quedado sola en la parte más alta del teatro. Me invade la satisfacción de la ilusión recibida en esta gala. Entonces la veo. En el escenario, una mujer vestida de principios del siglo XX flota, saluda al siglo XXI en la que será para siempre su casa.