Almería y Andalucía

“Andalucía es la esencia de España”: con estas palabras de Blas Infante, padre de la patria andaluza, podemos definir a Andalucía en el día de su cumpleaños. Porque, este es exactamente el sentimiento de cualquier andaluz. Es verdad que nos identificamos con unas costumbres, un folklore, una cultura, un arte y hasta un lenguaje muy propio, pero también es cierto que nadie se quiere separar de España o renegar de su identidad española. 
Por tanto, el sentido del 28 de Febrero y, en definitiva, del andalucismo va más por el camino del  progreso económico, cultural y social para conseguir superarnos como pueblo y alcanzar un bienestar semejante a las regiones más industrializadas de España. La ilusión llenó aquellos años finales de la década de los 70 y comienzos de los 80 y los andaluces salimos a la calle con el objetivo de que nos hicieran caso por primera vez en la historia para convertirnos en ciudadanos de primera y salir del ostracismo al que tradicionalmente hemos estado sometidos. Y, todos juntos, lo conseguimos para muchos años después presentar una situación bien distinta a aquella de 1979: el analfabetismo se ha reducido drásticamente, las aldeas y pueblos existen gracias a la inversión en comunicaciones e infraestructuras, el acceso a la educación y a la sanidad es mucho más universal…Vamos progresando, aunque de forma irregular y con discriminaciones a algunas provincias e ineficacia burocrática. Esta dificultad endémica del sistema ha frenado la generación de industrias (la asignatura pendiente de nuestra tierra) y ha impedido que Andalucía  deje de ser una de las regiones más atrasadas de Europa. Por ello, y con el propósito de que la autonomía tenga sentido, hemos de dar otro salto adelante para modernizarnos y europeizarnos de forma más acelerada. Sólo así, generando tejido industrial y tecnológico,  podremos llegar algún día a alcanzar a otras zonas de la UE más evolucionadas. Bueno, y Almería, ¿qué?: históricamente los almerienses venimos siendo ignorados por los distintos gobiernos centrales y autonómicos. Los repetidos resultados electores en la provincia de Almería son suficientemente relevantes como para comprender que nos sentimos marginados por la Junta con respecto a otras provincias. No quiero enumerar aquí promesas incumplidas, proyectos inacabables…sino que prefiero pensar que este 28 de Febrero de 2017 será el día del despertar de una provincia a la que todas las administraciones han olvidado pero especialmente la andaluza porque a esta Comunidad pertenece Almería. ¿No creen ustedes que  ha llegado la hora de saldar la deuda con una ciudad que es la que más aporta y menos recibe de la Junta de Andalucía?