La Junta del PSOE de Sevilla

No nos engañemos: la Junta de Andalucía no existe. Lo que sí existe es la Junta del PSOE de Sevilla, o como quieran llamar ustedes a esa institución que vive y se desvive por mantener en Andalucía el modelo social que más favorece a los intereses del Partido Socialista. Un modelo, además, que voluntariamente ha difuminado las necesarias fronteras entre la Institución y el partido que la sostiene políticamente. Y así, después de más de  tres décadas de juntandalucismo imparable, a ver quién es el guapo o la guapa que, ciñéndose a los hechos, puede determinar dónde empieza y termina la Junta y dónde empieza y termina el/la PSOE. Es un empeño imposible, más que nada porque ni en la Junta ni en su partido matriz han querido que existan diferencias. Todo se ha mezclado y solapado de tal modo que el Discurso Institucional de la Junta es, sencillamente, el que viene marcado por los intereses y estrategias del PSOE. Habría que escuchar a los socialistas si el presidente de una comunidad -o un alcalde- aprovechase un acto institucional para hacer política. Pero ellas y ellos tienen más derechos que nadie y pueden hacerlo cuando y como quieran. De hecho, la Presidenta de la Junta, Susana Díaz, no dudó en utilizar su discurso institucional de este 28-F para decir que “no eran concebibles” las malas infraestructuras ferroviarias de Almería. Y llevaba razón. Pero eso lo dijo la máxima responsable de la Junta de Andalucía, administración que acumula en Almería una media de diez-quince años de retraso en todos sus proyectos infraestructurales. Piensen en el estado de las obras de la Plaza Vieja, el Materno-Infantil o la variante del Almanzora y vuelvan a pensar en las palabras de doña Susana. Lo que no es concebible es que Susana Díaz sólo quiera ser presidenta de los almerienses que, con razón, exigen mejores trenes, despreciando a los que, también con la misma razón, exigen a la Junta mejores colegios y mejores hospitales. Y es que la Junta de Andalucía no existe: es un invento de los padres de la patria.