Temas caseros

Hay días que es preciso abandonar los grandes temas con repercusiones teóricas para ocuparse de la casa, a lo que realmente interesa desde el punto de vista familiar y cotidiano. Así que en punto a preocupaciones diarias de confort nada tan urgente y solicitado como el agua. Hace solo unos días, concretamente el 4 de marzo en la Plaza del ayuntamiento de Roquetas de Mar tuvo lugar una concentración de los grupos de la oposición para exigirles al Partido Popular y a Ciudadanos que anulen el llamado “tarifazo” aprobado por ellos. Para los oponentes representa una de las mayores subidas de los recibos del agua y alcantarillado de la que se tiene  memoria en este municipio”. No estamos pues  dentro de la mística creacional de San Francisco de Asis, el que calificó al agua de humilde, preciosa y casta. Estos son otros tiempos y otros valores. Hoy el liquido elemento es fuertemente anhelado desde otras urgencias. Y conste que no entramos en la larga historia de la sequía almeriense sobre la que pesan ya varios tomos de muchas páginas. Estos días últimos, los tres grupos que forman la oposición en el ayuntamiento roquetero, es decir, PSOE, IU y Tú Decides, se reunieron para exigir al PP que anulara el llamado “tarifazo”, Y no paran aquí las manifestaciones no violentas al descontento de la población. A la política conservadora vinieron a describirla  cono una forma semioculta de “estafa” por  cuanto alegaron que subían el precio en base  a una mayor calidad, cosa que todavía no se ha cumplido, tal como sospecha la Plataforma. Los tres grupos que salieron a la calle prometieron continuar haciéndolo hasta conseguir la derogación de las tasas, una auditoria sobre costes reales de la concesionaria Hidralia y la prestación de los servicios de depuración y reutilización. Dice la nota que en la manifestación se oyeron voces como “no nos traguemos el tarifazo”, “esta subida es un mal trago”. Por el momento las cosas no se salen de madre. Nada que haga evocar la violencia y la crueldad popular de otros tiempos en torno al líquito elemento, pero si antes no ponemos remedio, puede  dar lugar a enfrentamientos muchos más duros, El agua limpia, preciosa y casta de los místicos, metáfora de los ojos del amado,   podría dar lugar a otros ojos menos amorosos, estos en forma de odio y de legón con puntas de acero.