El estado de salud veraniego

Ya ha llegado el periodo estival y con ello las vacaciones, obviamente para quien tenga y quien pueda disfrutar de las mismas. Y con esta llegada del calor infernal, de extrema sequía y de incendios llega también la pesadilla veraniega  de los usuarios y profesionales de la sanidad pública andaluza.
Se supone que en verano disminuye la población en las ciudades por las vacaciones, los profesionales que llevan trabajando todo el año, se van de vacaciones y ambos hechos  se suponen que tienen que justificar el cierre de camas en centro hospitalarios. Pero, paralelamente, existen lugares, sobre todo de costa o de destino vacacional, donde el número de población aumenta. Dentro de estos podríamos situar a Almeria y sus zonas de costa, destino vacacional elegido por muchos, lo cual es comprensible dado que disponemos de las mejores playas del litoral Mediterráneo (me puede mi pasión almeriense).
Nos encontramos con largas esperas en centros de urgencias y con cierre de camas debido a la falta de cobertura de esos profesionales que van a gozar de un descanso merecido. Y esta situación y su consabido y reiterado caos, se supone que tiene que preverse con  el “Plan Verano”. El servicio de Salud Andaluz debe de ser exhaustivo, riguroso  y sobre todo transparente a la hora de determinar qué centros se cierran y qué cobertura profesional tendrán aquellos que permanecerán abiertos. Es claro que en estos últimos habrá mayor confluencia de gente y en consecuencia , no basta con el mantenimiento de su apertura, sino que es necesario un refuerzo y tener en cuenta la ratio necesaria que debe de existir entre el número de población ocasional, en este caso y el número de médicos y enfermeros.
Pero ante situaciones de listas de espera, de los peligros de enfermar en verano, lo que hay que poner son soluciones y en ello es para lo que esta Ciudadanos.
Buscando siempre la utilidad, que no la confrontación, es por lo que Ciudadanos, más allá de los problemas veraniegos de la sanidad, también llevo a cabo en el Parlamento Andaluz una iniciativa para solucionar la lista de espera con la creación de un grupo de trabajo formado por profesionales (no políticos, pues “quien la lleva la entiende” y en este caso son ellos los que se enfrentan a este problema y en consecuencia los que están legitimados para opinar y sobre todo los mayores conocedores de las soluciones posibles),. Este grupo ya ha dado sus conclusiones y ahora le corresponde  a este Gobierno ponerlas en práctica.
También y dado que apostamos por una sanidad pública de calidad, en el acuerdo de presupuestos de 2017, entre Ciudadanos y el PSOE, una de nuestras exigencias fue el incremento monetario para el sistema sanitario de un 5,4% más con respecto al ejercicio anterior y dentro de ese aumento, 97 millones eran para gasto de personal. Gracias a ese incremento exigido, es por lo que se ha conseguido que este verano, al menos, se haya anunciado por parte del Gobierno andaluz esa mayor inversión para garantizar las sustituciones de los profesionales, (que en el caso de Almeria es de un 8,8%) y que no se vea afectada la atención sanitaria.
En definitiva, gastar más en sanidad, pero sobre todo mejor y que en modo alguno se ponga en peligro en los meses estivales, ni la calidad, ni la seguridad en el servicio, no solo pensando en los usuarios, sino en los propios profesionales que no tienen otro deseo que poder llevar a cabo su trabajo con tiempo, dedicación y las mejores garantías para sus pacientes y sobre todo sin “recortes” veraniegos.