De nuevo tenemos que escribir del ministro De la Serna. ¡Qué lata!

No estuvo con la Mesa de Tejada, el ministro lo hizo con la de Cano. Debió pensar el hombre que era preferible sentarse entre chaquetas y corbatas que entre descamisaos y pantalones vaqueros. Y así lo hizo. El presidente de la Cámara lo decía clarito, nosotros no vamos a ser los de la pancarta. Ya sabes para lo que te ha dejado el señor Cano, Tejada, para que le lleves la pancarta. Ellos a la negociación en las alturas, en los despachos, con traje y pajarita si llega al caso. La pancarta, la caja fúnebre y la charanga te la dejan a ti. Son las diferencias de clases presentes en nuestra sociedad. ¿O crees que te iban a perdonar en las alturas del empresariado almeriense que les quitaras el protagonismo de los veinte años que llevan en la Mesa de las Infraestructuras? Uno puede entender que el ministro se reúna con la Cámara, con Asempal y con el PP, pero ¿qué hacían los partidos de la izquierda en la reunión? Eso, ¿qué hacían? ¿También te han abandonado, Tejada? Duro está empezando a ser lo tuyo, te acercas peligrosamente a la situación de Miguel Cazorla entre las huestes de Rivera. ¿Y De la Serna, qué, no dijo que iba a escribir de él? Si es que no sé qué contar. Para la derecha, incluidos los empresarios, el ministro estuvo bien, ha cumplido con lo que dijo en su día y Granada va a estar a una hora a partir del 2023. ¡Bien! Para la izquierda un desastre, nos deja a los almerienses sin AVE a Granada, y no le interesa destacar lo del ancho de vía internacional. Lo demás, las promesas de siempre. Ya está casi todo dicho. Sí al dinero para la rehabilitación de la estación del tren y adelantos en los plazos del paso a nivel del Puche. 
Nada nuevo sobre la tierra. Llevamos lustros esperando que se enluzca la vieja estación y del paso a nivel tras más de veinticinco años mejor no hablar, son unos caraduras estos caballeros. Total, la noticia ha estado en la no reunión con la Mesa del Tren, en la postura de la Cámara de Comercio y su presidente poniéndose la medalla y la dejada de la pancarta para José Carlos Tejada y sus mariachis, perdón, su charanga. Una cosa me falta por comentar, con todos los errores que ustedes quieran, pero han sido Tejada y sus boys los que han dado la cara por el tan necesario tren almeriense. No se merecían este trato, señor De la Serna.