Llega la hora de la verdad, el voto secreto de los militantes

Ahora a pelear los votos de los militantes, dicen en el PSOE. Con ventaja parte, y muy clara, el actual secretario, José Luis Sánchez Teruel. La presencia de Juan Carlos en la pelea por los avales le ha venido muy bien a Teruel. Ahora llega el momento de saber de verdad con quién está Pérez Navas. Dice que forma parte del proyecto de Susana y que nadie lo sacará de él. Una pregunta: ¿Los militantes que han avalado a Juan Carlos, si este decidiera retirar su candidatura, votarían a López Olmos? Los avalistas de Pérez Navas deben apoyar a Susana Díaz, pues él ha dicho que es su proyecto, por lo que entiendo que están en contra de Teruel y de Adela, ¿esto es así? Si Juan Carlos se retirara de la fase final le puede crear un problema a Teruel, o por lo menos le mete durante unos días las cabras en el redil. El susto ante la futura votación secreta no hay quién se lo quite. Con todo, sigo pensando que la fuerza de los sueldos de la Junta de Andalucía repartidos entre la militancia tiene y controla la mayoría del PSOE en la provincia. Y si Juan Carlos es de Susana y Teruel también, solo puedo pensar en una pelea particular entre ellos, con una frase lapidaria de Teruel sobre Navas: “Creí que Pérez Navas aceptaba dedicarse a la alcaldía, después descubrí que no”. Y cuando usted se dio cuenta, ¿qué hizo don José Luis? Le permitió seguir de secretario de organización, senador y portavoz en el ayuntamiento, tres cargos, tres. Se sintió engañado, lo entiendo, pero no hizo nada, ¿o quizás no le dejaron? Cierto que desde la barrera se ven y con tranquilidad los toros, y reconozco que en política tras conocer los números es fácil hablar, con ellos en la mano el triunfo es suyo y claramente, sus rivales a mil votos cada uno, claro que si suma los de Olmos y Navas la victoria ya no es tan contundente, la sorpresa puede estar presente, de ahí que a usted, señor Teruel, le interese que Pérez Navas llegue hasta el final de esta aventura, aventura en la que algunos hemos visto una mano detrás y muy interesada, ya que una división a tres beneficiaba a uno de los candidatos. Y los resultados de los avales lo han dejado claro.
Ahora toca pelear los votos de los militantes, y en este caso son secretos, por lo que no se pueden descartar sorpresas de última hora. ¿Nos la dará don Juan Carlos? Habrá que esperar.