Deuda, misterio y escándalo en las cuentas de la urbanización de El Toyo

Leyendo a Carlos Medina hace unos días sobre las vicisitudes que están pasando los vecinos de la urbanización del Toyo con su entidad de conservación, evoco las que pasamos los entonces de Retamar hace ahora veinte años con la nuestra. Las mismas mentiras y patrañas de los políticos, la misma ocultación sobre las cuentas y sus deudores, el mismo escándalo de unos políticos escondidos no sabemos en qué intereses, pero defendiendo a capa y espada a una entidad y a unos dirigentes de la misma. Carlos no sabe por qué de esa defensa, y lo pregunta. Nosotros en aquellos años tampoco lo sabíamos, y aunque lo preguntamos en cada asamblea nunca tuvimos la suerte de que los políticos de entonces nos lo manifestaran. Nos pasaba lo mismo que a ellos, las muchas superficies sin construir y en manos de grandes empresarios almerienses tenían más votos que los demás y cerraban toda posibilidad de que se nos contara lo que pasaba, que no era tan diferente a lo que le ocurre ahora a Carlos Medina y compañeros de la Asociación. Ponían y quitaban dirigentes a su antojo y los políticos representantes en la entidad daban la impresión de estar más preocupados por esos empresarios que seguían manteniendo el poder en la urba que por los vecinos que pagábamos cuotas a la entidad e impuestos municipales. Lo mismo que les ocurre a los vecinos de ahora. ¿Y qué reciben de los actuales políticos? Carlos lo contaba en su artículo de La Voz, patrañas, mentiras.

¿Qué recibíamos de los de entonces? Leyendo a Carlos tienen la contestación, han pasado los años, han llegado otros políticos pero las respuestas son las mismas, la preocupación por los vecinos no parece que entre en el adn de los políticos, sean de ayer o de hoy. Y viendo el comportamiento de los nuevos y los “chaletes” que se compran, no tengan esperanza en los de mañana. Calcados. Como fotocopias. Parecen sacados del mismo molde, amasados y horneados en el mismo obrador.  Lo siento por vosotros, yo dejé Retamar sin que se hubiera solucionado el problema, luego me enteré que ante unas elecciones municipales algún partido político se lo pensó mejor y decidió solucionarlo, se podía encontrar con la pérdida de miles de votos. Deseo que no abandonéis, tenéis unas elecciones municipales dentro de un año, aprovecharlas y al cuello. Me dicen que se ha muerto El Nene.