¿Y si Cs baja en Almería y pone en peligro el escaño de Marta?

Los datos, me cuentan, salen de los propios despachos de Ciudadanos Almería y, ya se pueden imaginar el morrocotudo enfado que tiene doña Marta Bosquet y su equipo. Las encuestas que maneja el partido de Albert Rivera no son nada agradables para sus aspiraciones. Y es que no se le puede estar poniendo una vela a la derecha, otra a la izquierda y mantener la equidistancia de la pureza política como hace Cs. Marta vota a favor de Susana y de sus cuentas a lo largo de estos años, pero a Susana, según la señora Bosquet, le da urticaria la democracia, a ella no, ella lucha por la democracia y la participación. Miguel vota a favor de Pacheco y de sus cuentas estos años, pero asegura que Pacheco no respeta los pactos y que la culpa de todos los males de la ciudad los tiene el equipo del Partido Popular. Todo indica que las encuestas realizadas para el partido de Rivera en Almería recogen esta incoherencia política en la que se ha movido durante estos cuatro años el grupo, por lo que según se apunta, Marta y Miguel, o la persona que encabece la lista por Almería pueden perder apoyos ciudadanos en las autonómicas y municipales. El enfado es de tal grado en el grupo de trabajo provincial, porque según los datos internos que se barajan en estos momentos, Bosquet no tiene asegurado el escaño por Almería. ¿Qué me está diciendo? No lo digo yo, ojo, son los datos que ellos manejan los que ponen en tela de juicio el escaño andaluz de Ciudadanos por Almería. Cierto, y estoy de acuerdo en que las encuestas no tienen validez alguna; las buenas, las únicas e importantes son las votaciones de los ciudadanos, y me uno con los que así piensan, pero cuidado, no descartemos que son síntomas a tener en cuenta, indicios de por dónde camina la opinión pública almeriense. Y desde hace tiempo venimos advirtiendo que Ciudadanos pagaría en las urnas el contrasentido de estar poniéndole una vela al Psoe y Santa Susana y otra al Pp y San Pacheco. Hace unos días anunciaban desde el partido que ya tienen en la capital el número de militantes necesarios para tener que hacer unas primarias. Optimismo vendían, y se comprende, pero ya tenían conocimiento de que las encuestas no les salían tan optimistas, no beneficiaban en la parte más importante, la capital y el voto para la andaluzas.