Con hachas y antorchas en la mano

Un clásico en los asuntos abordados por esos libros de autoayuda que tanto éxito editorial tienen consiste en señalar que de todo se puede aprender, incluso de las más grandes derrotas o de los padecimientos más horrendos. Y no seré yo quien niegue el aserto. Podemos aprender a tener cuidado con el martillo después de machacarnos un dedo poniendo un cuadro o podemos ver aspectos positivos en una -nueva- derrota electoral.  Y sinceramente, si yo fuera el representante literario de Paulo Coelho no tardaría mucho en telefonear al secretario general del PSOE de Almería, José Luis Sánchez Teruel, que pocas horas después de sufrir otro batacazo electoral en nuestra provincia ofrecía una entrevista que bien podría ser el primer capítulo de un libro de esos de autosanación mental o milongas vaporosas similares. “Veo a Susana Díaz motivada y con fuerza, y con todo el partido detrás”, decía en el titular, que nos recuerda vagamente al conocido opúsculo “Optimismo y Salud”, del profesor de Psiquiatría en la Universidad de Nueva York, Luis Rojas Marcos. Y es que una cosa es enfocar la vida a través de una lente que acentúe sus aspectos favorables para convertir esa mirada en un factor protector de nuestra salud, como dice el eminente profesor, y otra bien distinta intentar vender una bacalá con los ojos malos. 

El propio Sánchez Teruel debería ser consciente (y si no lo es, aquí está este modesto espacio de opinión como clarín de alerta) de las diferentes reuniones, desayunos y comidas que se están celebrando estos días entre destacados y exdestacados miembros de su partido, en las que se habla alternativamente mal de Pedro Sánchez y de Susana Díaz, y tiro porque me toca. Se trazan estrategias, se apuntan plazos y se habla de que quizás sería bueno que otro u otra fuera el encargado o encargada de salir a explicar lo mal que han hecho los almerienses no votando al PSOE. Y es que es verdad que el PSOE está detrás de Susana Díaz, pero con hachas y antorchas en la mano.