Harían bien los políticos españoles en estudiar detenidamente el llamamiento del Rey Felipe VI a la convivencia, convencida como estoy de que, en cualquier momento, si siguen echando gasolina al fuego puede saltar la chispa que avive la discordia, el odio, la guerra entre familias y amigos. De ahí la necesidad de que una Institución moderadora como es la Monarquía, utilice todo su prestigio para aplacar los ánimos de quienes se creen con derecho a poner patas arriba la democracia en nuestro país.
Creo que todos estamos de acuerdo en que el tema catalán ha calado en nuestro país, como ningún otro, debido a la gravedad de los acontecimientos que tuvieron lugar en el Parlamento el 10 de octubre del 2017 y que ha llevado a los líderes del procès a prisión, preventiva pero prisión, so lo a espera de lo que decida el tribunal que les juzgue. De ahí lo importante que es que mientras eso sucede, se imponga el diálogo, para evitar que quienes no se sienten independentistas radicales, se sientan apoyados por el gobierno de la nación, pero también por la oposición, y que quienes se sienten independentistas pero no quieren separarse de España, tengan un asidero al que aferrarse en momentos tan cruciales como los que estamos viviendo.
Por qué no esforzarnos más en lograr que las aguas vuelvan a su cauce, que discurran sin que ello suponga un desgarro emocional, familiar, de convivencia.
Dice el refrán que dos no discuten si uno no quiere. Apliquémonos el cuento. A Torra y al resto de representantes de la Generalitat se les neutraliza el discurso si ven que todos los demás, C’s, PP, PAOE, Podemos y Sociedad Civil, reman en la misma dirección, y no cada uno por su lado, utilizando la diversidad de opiniones para conseguir el voto de la rabia, de la crispación y de la exclusión. Así no. Menos aún, utilizando este grave problema en el resto de las comunidades autónomas, como ha ocurrido en Andalucía, para posicionarse políticamente.
Las heridas no se curan echando sal. Bien haríamos en escuchar al Rey Felipe VI: es imprescindible que aseguremos la convivencia en un país en el que durante cuarenta años hemos disfrutado de paz y prosperidad, y de una democracia que ha sido la envidia de quienes nunca pensaron que en España pudiéramos conseguirlo.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/9/opinion/164460/es-la-convivencia