Las propuestas

Hasta el momento, los partidos mayoritarios no han hecho públicos sus programas electorales, lo cual no quita para que filtren algunas propuestas. Esto ha ocurrido este fin de semana con motivo de la conferencia política del PSOE y lo mismo ha hecho el PP en el acto de Valencia. En general hay que decir que Rubalcaba ha intentado dar un giro a la izquierda. Parecerá una vacua redundancia afirmar esto en un partido que fue fundado para elevar el nivel de vida de los trabajadores, pero es que la crisis lo puso todo boca abajo y Zapatero tan pronto parecía un político de derechas como que sacaba adelante su programa de avances sociales recortándole el sueldo a los funcionarios. Rubalcaba al menos, busca algo distinto. En sus propuestas hay una defensa de lo público; no tocar la educación ni la sanidad; perseguir el fraude fiscal, control del urbanismo, sancionar la mala praxis bancaria, elevar el impuesto del tabaco y el alcohol, paridad etcétera. Hay en las propuestas de Rubalcaba algo que siendo viejo parece nuevo dado que nunca se ha conseguido en este país, y es el debate sobre los ingresos. Una doctrina tan equitativa y tan obvia como que quien gane más, pague más, no entra en la cabezota de banqueros y altos empresarios. El PP monta todas sus propuestas en la contención del gasto y en los guiños zalameros al gran capital. Doctrina sospechosa porque sin subir los impuestos, conteniendo incluso el despilfarro, dudamos si podrá mantener la escuela pública y la sanidad. La primera reacción de la derecha es decir que Rubalcaba pertenece al pasado. Bendito pasado si alguna vez la recaudación fiscal se pusiese en práctica entre españoles. Ha escrito Javier Marías que si Rubalcaba representa el "pasado", Rajoy sería el "pasado remoto" porque sólo le interesa el control del gasto. Así que parón en la ley del aborto, cambios en el matrimonio homosexual, las diputaciones que sigan como están, los alcaldes podrán doblarse en diputados, bajada y contención de salarios, despido flexible, 3000 euros al emprendedor que contrate a alguien. He aquí las novedades economicistas del PP que nunca quedan claras tratándose de Rajoy. Démosle un par de meses de espera.