¿La historia entre la derecha de la capital y El Ejido se repite?

Las directrices de la dirección provincial del Partido Popular se la pasaban los populares de El Ejido por el arco del triunfo. Eran los tiempos en el que los políticos de El Ejido, especialmente desde la derecha y del entorno de Juan Enciso y Pepe Añez, se creían estar por encima del resto de la provincia. Había conseguido superar en aquellos momentos a Roquetas y pensaban que tenían a la capital a tiro de piedra. Habían conseguido hasta El Corte Inglés antes que la capital y construido el primer rascacielos provincial. Jugaron fuerte y ganaron la primera batalla en diputación, se enrocaron en sus cargos, intentaron defender al rey y al final las torres cayeron, los caballos galoparon, los alfiles se les volvieron en contra y los peones se fueron a sus casas cuando a los jefes se les acabó el dinero de sus soldadas. A la política hay que ir con los deberes hechos y da la impresión de que los de Vox en El Ejido algo pardillos andan, o tan chulapos políticos como lo fueron en su tiempo Enciso y cía. La historia del nombramiento del diputado provincial por la zona de Berja no ha dejado de ser una estupidez por parte del señor Bonilla, o una bisoñez tonta y absurda que ya vemos a donde le ha llevado, a rendirse al final ante Madrid. Pero debe saber el señor Bonilla que su carrera política ya tendrá para siempre un borrón ante los jefes, fiarse de usted va a ser complicado a partir de ahora. Con lo fácil que hubiera sido negociar con su partido el diputado provincial y hacer valer su cuota de poder conseguido, que lo tiene y muy importante, y no imponer un hecho que tarde o temprano se iba a volver en su contra, como así ha sido. De imponer sabía mucho en su época el señor Enciso. Impuso a Pepe Añez como presidente de diputación y la historia ya la conocen los almerienses. Parecía que estábamos en las mismas, otro “iluminao” político que se cree el nuevo redentor ejidense y se pone al partido por montera,  pero el señor Bonilla ha rectificado, alguien le ha debido recordar lo sucedido hace años con otros rectores de la derecha política ejidense y cómo terminaron todos ellos. Capítulo aparte merece la gestora nombrada. ¿Ha tenido algo que ver el señor Bonilla en el nombramiento de la misma? Hace unos días lo comentábamos por aquí, los aluviones llenan los partidos de roedores.