Honderos en la onda del PSOE

Antes de entrar en batalla, las legiones romanas contaban con el apoyo de unidades ligeras de infantería irregular -los vélites- formadas por honderos que intentaban flanquear al enemigo para desconcentrarlo a base de pedradas. Se trataba de una estrategia primitiva, pero muy efectiva, porque los galos o los pictos de turno empezaban a combatir ya cabreados por los cafres que les habían intentado descalabrar en un

momento tan serio. 

Y salvando las distancias y entendiendo que estamos hablando de contextos diferentes (una obviedad que no siempre es percibida por la brigada de ofendidos de guardia) esta táctica es uno de los recursos clásicos del manual de estilo del PSOE de Almería, que cuenta siempre con alguna agrupación auxiliar dispuesta a agitar la honda. Quiero decir honda con h, por lo que tampoco quiero aludir a ninguna emisora radiofónica. Ahora hay que explicarlo todo para evitar soponcios innecesarios. Por eso, lo que hoy están viendo en un grupo de pinguruchistas dolientes no es nuevo.

Comprobar una vez más que hay movimientos ciudadanos que se activan “espontáneamente” justo en el momento que más conviene al PSOE almeriense es como ver que por la mañana amanece. Por lo tanto, estas actuaciones de coros y danzas cívicas en la jornada previa a una moción plenaria del PSOE no es sino el tráiler de la película que mañana presentarán los propios concejales.

Pero ya digo que esto lo hemos visto. ¿Recuerdan cuando el Corte Inglés quiso instalarse en La Salle? Casualmente hubo asociaciones que empezaron a protestar porque se quitaba un centro escolar y aparecieron pasquines lamentando el “caos de tráfico” que se iba a generar en el centro de Almería. Y en paralelo, la Junta de Andalucía se apresuró a declarar al colegio Bien de Interés Cultural. Si es que ya nos sabemos esta coreografía: más clásica que la Guerra de las Galias, que no de las Galaxias. Hay que explicarlo todo.