Sentido común frente a improvisación

A partir de mañana, los menores de 14 años podrán salir a la calle tras semanas de confinamiento por el coronavirus. Una buena noticia que, de nuevo, se topa con la falta de previsión del Gobierno de España. Y es que en estos momentos -viernes por la tarde-, mientras escribo este artículo, aún no se ha publicado la orden ministerial que establezca de forma clara y concisa qué estará permitido, cómo y dónde. A estas horas, la única información  es una rueda de prensa del vicepresidente Pablo Iglesias y muchas, demasiadas, suposiciones.

De momento, sólo sabemos que podrán salir una hora al día acompañados por un adulto, de nueve a nueve, en un radio máximo de un kilómetro y que no podrán utilizar los parques infantiles. Pero, ¿y las playas? ¿Y las plazas? No lo sabemos, por eso es tan necesaria  la orden que aclare en qué zonas se puede transitar y cuáles seguirán vetadas para, por ejemplo, reorganizar el servicio de limpieza en nuestra ciudad, centrado en las últimas semanas en los espacios con mayor congregación de personas como los entornos de los centros de salud, las farmacias, las residencias de mayores y los supermercados. Un escenario que se ampliará, irremediablemente, este domingo. 

Ante la ausencia de una hoja de ruta para la desescalada por parte del Gobierno de la Nación, desde el Área de Sostenibilidad Ambiental trabajamos bajo la premisa de un riesgo más homogéneo, por lo que la limpieza viaria se intensificará en todos los barrios y espacios públicos donde prevemos que habrá mayor presencia de personas para garantizar que nuestros niños vuelvan a llenar de alegría las calles bajo condiciones de máxima seguridad.

Una vez más, los ayuntamientos nos vemos obligados a adelantarnos en la toma de decisiones, aunque tengamos que actuar a ciegas y basándonos en el sentido común, que tanto falta en este Gobierno de la improvisación.