Principio de inercia

Lo que afirmaran Galileo y Descartes a propósito de que los cuerpos tienden a mantener su estado de movimiento, le serviría más tarde a Newton para establecer la primera gran obra de la Física, ‘Principios matemáticos de filosofía natural’, donde establece las leyes de la dinámica, de donde se extrae que cualquier cuerpo se opone a cambiar su estado de movimiento o reposo.

Esta inercia de los cuerpos es extrapolable al Partido Popular. Su querencia a que le investigue la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía Nacional (UDEF) es espectacular. Al más estilo Gobierno de Aznar, al que la UDEF investigó por la Caja B del PP, el gobierno de Ramón en el Ayuntamiento de Almería parece haber recibido también la visita de la UDEF. Pero el King of posturing almeriense no quiere hacerse ninguna foto de postureo dando explicaciones del registro por parte de la Policía Nacional de áreas como la de Sostenibilidad ambiental, ni de los expedientes que se llevaron, y ya ha pasado más de una semana.

Ese estado de movimiento con distintos alcaldes del PP en el Ayuntamiento de Almería, que año tras año les ha llevado a poder hacer y deshacer a su antojo, nos ayuda a no sorprendernos de los registros. Y es que, esa cara sonriente que nos meten hasta en la sopa, es la misma que oculta determinados movimientos en las cuentas públicas incluso al Tribunal y a la Cámara de Cuentas, de otro modo sería inexplicable que todo lo que se gastó con la Capitalidad Gastronómica no tenga contrato, o que, entre otros muchos ejemplos, las coronas de los Reyes Magos de la Navidad pasada fueran un regalo de sus majestades, porque tampoco reza contrato existente.

La primera Ley o Principio de inercia de Newton, según la cual un cuerpo no modifica su estado a no ser que se le aplique una fuerza, nos lleva a concluir que, o la UDEF encuentra algún traspié en el popular modus operandi, o los almerienses tendremos la responsabilidad de aplicar esa fuerza pacífica en las calles y en las urnas, para desatarnos de una vez del clientelismo y la mala praxis política en el Ayuntamiento de Almería.