Los silencios de Griñán

Hace unos días conocíamos un nuevo capítulo del escándalo del desvío del dinero destinado a la creación de empleo en Andalucía. El ex director general de empleo, Francisco Javier Guerrero, principal imputado en la trama de los ERE fraudulentos, era el encargado de conceder las falsas subvenciones desde el -fondo de reptiles-. Su chófer ha confesado que ambos gastaban parte del dinero de los ERE en fiestas, copas y cocaína. Nada menos. Con la declaración voluntaria del chófer de Guerrero a la Policía se supo que este le pedía que le diera nombres para concederles ayudas o que creara empresas falsas para desviar el dinero. Desveló que él mismo recibió subvenciones por valor de 900.000 euros de su entonces jefe, sin que ese dinero se destinara al uso para que el que se le concedió. A esta cantidad hay que añadir otra ayuda fraudulenta recientemente descubierta: 450.000 euros que ambos fingieron dirigir al proyecto de una granja de pollos en la que Trujillo participaba. En total, casi un millón y medio de euros detraído de los fondos públicos para el beneficio particular del ex dirigente socialista y su chófer. Pero el gobierno de la Junta de Andalucía no parece albergar la intención de hacer nada para recuperar el dinero expoliado. Ningún organismo se ha puesto en contacto con el chófer del ex director andaluz de Empleo para que devuelva el dinero que se le concedió ilegalmente. A pesar de que en 2008 la Junta ya conocía que la Agencia Tributaria estaba investigando estas ayudas, no se ha iniciado ninguna acción penal o administrativa para recuperarlas. Muy al contrario, Griñán sigue eludiendo asumir responsabilidades, presionando a la magistrada que investiga la trama corrupta con insinuaciones en contra de su labor, que se ha intentado obstruir con la demora en la entrega de la documentación que se le solicita. Con un 30% de paro en esta comunidad, el dinero para la creación de empleo ha sido el principal objetivo de las corruptelas. Cabe recordar otras noticias de similar naturaleza que vienen siendo lentamente conocidas. Traigamos a la memoria las subvenciones pagadas a empresas por la Consejería de Empleo para incorporar a sus plantillas a personas con discapacidad que jamás ocuparon sus puestos y, en la misma línea, la investigación que lleva a cabo el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía sobre las ayudas a la contratación indefinida pagadas con fondos europeos. Recordemos también el caso de las subvenciones a los centros de formación, que solo se cobraron una víctima política, el número dos del PSOE andaluz, Rafael Velasco, o los escándalos protagonizados por los hijos del ex presidente Chaves, que se sitúan en el punto de mira tras recibir subvenciones y, presuntamente, formar parte de una trama de tráfico de influencias. Quienes llevan 30 años gobernando en Andalucía intentan ahora, a la desesperada, tapar los escándalos con los que se ha despilfarrado el dinero público. El caso de los ERE fraudulentos, a través del que se repartieron mil millones de euros del dinero de los parados, se desborda con nuevas informaciones que señalan directamente al silencio de Griñán. Sorprende, desde luego, que la Junta no se haya personado como acusación particular en cada una de las causas abiertas, tanto como que haya tardado casi un año en solicitar la devolución de las cantidades concedidas en la trama de los ERE falsos que fueron cobradas por cargos socialistas, familiares y afines.Pareciera que no hay explicaciones que ofrecer. El presidente del PP andaluz, Javier Arenas, lleva tiempo reclamando un pleno monográfico sobre el escándalo de los ERE, y ha invitado a Griñán a que lo esclarezca desde la tribuna del Parlamento. A mes y medio de las elecciones autonómicas, todo parece indicar que no lo hará.
Mientras, el PSOE sigue inmerso en la mayor batalla interna de su historia. Ni Rubalcaba ni Chacón han solicitado a Chaves o a Griñán explicación alguna sobre la mayor trama corrupta hasta el momento conocida en Andalucía. Nada dicen de los ERE falsos, ni de por qué consintieron este fraude, ni de las subvenciones a