La imparable transformación del corazón histórico de Almería

Las buenas noticias, en forma de nuevas inversiones y el desarrollo de proyectos fundamentales, llegan a nuestra ciudad en los días previos a la Navidad. Y es que, al inicio de las obras sobre el enclave de La Hoya, recuperando para el disfrute ciudadano un espacio único, de 42.600 m² de superficie en pleno Centro Histórico, se ha sumado el anuncio de la Junta de Andalucía de un conjunto de actuaciones por más de siete millones de euros en la Alcazaba.

Como bien destacaba el alcalde, Ramón Fernández-Pacheco, los almerienses estamos siendo testigos de un hecho histórico que va a suponer que la zona en la que comenzó la historia de Almería se convierta en motivo de orgullo para esta ciudad y de admiración de todos los que vienen a visitarnos. Al decidido impulso municipal que se viene dando al Casco Antiguo, con una inversión de más de diez millones de euros en distintas actuaciones en los últimos años, se suma, ahora sí, un compromiso compartido por parte de la Junta y del presidente, Juanma Moreno, para la puesta en valor del principal monumento de nuestra provincia, La Alcazaba, y seguir así redescubriendo el patrimonio de Almería. 

El proyecto global de reactivación del Centro Histórico de Almería, que estamos llevando a cabo desde el Ayuntamiento en colaboración con la Junta de Andalucía, convertirá el eje Plaza Vieja, San Cristóbal, La Hoya, La Alcazaba y Mesón Gitano en un recorrido de historia y de futuro para Almería. Hacer de esta zona un elemento generador de oportunidades de empleo, de emprendimiento, de turismo y de cultura es un objetivo al que nos debemos sumar, no solo las administraciones, sino toda la sociedad.

La restauración de las murallas norte y sur, de la muralla del Cerro San Cristobal y la mejora de la red de riego y abastecimiento, anunciadas por la Junta para La Alcazaba, son actuaciones esperadas y demandadas desde tiempo inmemorial que ahora, por fin, se van a hacer realidad. Igual que lo hará en poco más de un año la Hoya, reconvertida en jardín mediterráneo y, de forma inminente ,el Cerro de San Cristóbal, lo que transformará un espacio olvidado durante demasiado tiempo que se convertirá en motivo de orgullo para todos los almerienses y en un gran escaparate turístico, cultural, patrimonial y medioambiental de una ciudad que mira al futuro y respeta  y quiere su pasado.