Tras más de 9 meses de negociaciones, el 22 de diciembre se cerraba un acuerdo en materia laboral que viene a derogar aquellos aspectos centrales de la reforma laboral de 2012 que llevó a cabo el Partido Popular, que han tenido una mayor incidencia en la devaluación de los derechos laborales y sobre todo de los salarios en nuestro país.
El acuerdo para derogar la reforma laboral es inédito y muy ambicioso. Inédito porque es el primer acuerdo en más de 20 años de recuperación nítida y de mejora evidente de los derechos laborales de la clase trabajadora y muy ambicioso, ya que aborda el conjunto de materias que en las últimas reformas laborales se habían desregularizado y precarizado de manera muy importante, desde materias sobre la contratación hasta el equilibrio de fuerzas en la negociación colectiva, además de alternativas a los despidos para que estos dejen de ser la primera opción a la que acuden las empresas al más mínimo problema económico.
Esta profunda reforma laboral consolida un cambio de tendencia clarísimo en la regulación y legislación laboral por la que venimos apostando en CCOO en los últimos dos años. Además, si con esta reforma se consigue estabilizar el empleo y reducir drásticamente la temporalidad, se dará un gran paso adelante no solo para mejorar la calidad del empleo, sino, sobre todo, para mejorar la capacidad de negociación de los trabajadores y las trabajadoras.
Por otro lado, el equilibrio de la negociación colectiva es absolutamente clave. En la reforma de 2012 se puso en cuestión la pervivencia de los convenios colectivos y si no se llegaba a un acuerdo en un convenio este podría desparecer, gracias a este acuerdo, se ha recuperado la ultraactividad de los convenios colectivos. Hemos logrado revertir definitivamente esa norma. Ya no habrá convenios de empresa por debajo de los convenios sectoriales. Desde nuestro punto de vista, este acuerdo contiene un amplísimo paquete de medidas que en los próximos trimestres tiene que desplegar todos sus efectos, mejorando la estabilidad en el empleo, recuperando el poder de negociación de la gente trabajadora en los convenios colectivos y ofreciendo alternativas a los despidos. En definitiva, empoderando a la gente trabajadora después de 20 años ininterrumpidos de reformas lesivas. Por primera vez una reforma laboral recupera derechos cercenados en anteriores reformas y apuntala cambios en el modelo laboral que desde CCOO veníamos reclamando. La combinación de estas medidas es clave para evitar la disminución de los salarios como ha venido sucediendo en estos años atrás.
Supone también una importante modificación en materia de contratación laboral. En España existe una excesiva temporalidad, de difícil justificación, y sobre la que se ha asentado el actual modelo productivo, que ha producido vidas inestables y aplazadas sobre todo para nuestra juventud. Buena parte de esa temporalidad viene dada por el esquema legal de contratación, diversas modalidades, amplias causas para su realización y una duración excesiva en el tiempo. A esto le podemos añadir el abuso que se venía haciendo de la temporalidad, sin un control sobre el mismo. Este acuerdo pretende reducir drásticamente la contratación temporal.
Se produce también, un cambio sustancial en el modelo del contrato formativo. Desaparecen las modalidades actuales y se crea un único contrato formativo con dos modalidades diferentes: la formación en alternancia con el trabajo por cuenta ajena y el desempeño de una actividad laboral destinada a adquirir práctica profesional.
Además, se introducen medidas de flexibilidad interna negociada. Hasta ahora, ante cualquier situación económica adversa las empresas han priorizado el despido sobre cualquier otra medida orientada a preservar el empleo. La experiencia positiva de las medidas adoptadas en esta materia para hacer frente a la COVID-19, los ERTE y otras medidas de protección, han demostrado que es posible apostar por fórmulas negociadas, que protejan el empleo, a las personas trabajadoras y a las empresas y ha venido a reforzar la reivindicación en la que insistíamos desde CCOO, la de buscar medidas que evitarán los despidos.
En este acuerdo se modifica y amplía en algunos aspectos el artículo 47 del ET y se crea el 47 bis, para introducir una nueva medida de protección denominada mecanismo RED, cuyo objetivo es permitir a las empresas la solicitud de medidas de reducción de jornada y suspensión de contratos para estabilizar el empleo.
En definitiva, esta reforma constituye un hito incuestionable porque es la primera reforma laboral en los últimos 20 años de nuestro país que gana derechos, además de haber sido pactada y cuyos principios básicos han sido en todo momento inspirados por los agentes sociales.
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