Frescas aún las urnas en Castilla León, y después de un fracaso estruendoso del PP, el PSOE, Podemos, Ciudadanos (no se ha escapado ninguno), nos encontramos hoy con la noticia de que Mañueco no descarta «un acuerdo con el PSOE» para gobernar en solitario sin Vox como quiere Génova; eso es sencillamente mantenella y no enmendalla. Pues bien, allá ellos, cada uno se suicida como quiere o como puede, si tiene valor para hacerlo. La rabieta de Génova, más propia de unos niñatos ineptos, ignorantes , pedantes y engreídos, que de los dirigentes de un partido en cuyas manos algún día - aunque con estos mequetrefes, muy lejano - pueda estar el gobierno de España, puede tener consecuencias trágicas para España. En España, la derecha tiene un espectro tan amplio que cercenarla, es un error histórico en el que han caido estos ignorantes sin pensar en que no tienen derecho a sepultar de por vida las aspiraciones de unos votantes que están empezando cansarse de tanto mamarracho con estrellas pero sin capacidad, ni inteligencia de mando. Ahora quieren convencernos, - aunque no creo ni por un momento que sea verdad eso de que se plantean llegar a acuerdos con el PSOE -, de que van a gobernar sin VOX; y decía que no creo que pretendan ni tan siquiera negociar con el PSOE, después de haberles maltratado, ofendido, insultado, despreciado y escupido en la cara prácticamente a diario, hasta el punto de menospreciarles y hacer pasar por delante de ellos a partidos a los que la palabra España, les crea urticaria. Eso, en Román Paladino, se llama atropellar la razón. Y, atropellar la razón es la antesala del fracaso. El PP, no escarmienta y esto parece endémico, no me cabe otra duda ante su actitud orática, que dentro de su idiocia perenne, pretendan acabar con la derecha. El cáncer que Rajoy, con su cobardía y su inmensa indecisión, ocasionó al PP y, en consecuencia, a la derecha de este país, de la que se han contagiado los ineptos que dirigen en la actualidad el partido desde Génova, amenaza cada vez más con perpetuar al PSOE en el poder. La estupidez constante del centro que, en primer lugar nadie sabe lo que es, además del hecho contrastado de que no existe; tan solo existe en la mente de cuatro veletas que tienen miedo a definirse como de derechas y en la megalomanía de un periodista que pensó alcanzar el cielo y apenas si llegó al infierno. El PP, lo tiene fácil en cuanto a si actúa con inteligencia y visión de futuro; y muy difícil si opta por la desaparición como partido decisorio en la política española; Castilla y León en una indefinición y exenta de la personalidad de sus votantes; y, Andalucía, sin VOX, son una utopía incomprensible; y poco a poco, si continúa con su actitud suicida, también lo será España. Casado y García Egea, contagiados de la cobardía de Rajoy, se tienen que ir; porque de lo contrario, el PP, está afectado de una metástasis que ni siquiera la cirugía le podrá curar en unos meses más. La inteligencia del político se basa en una cuestión primordial, saber cuáles son sus fuerzas y conocer con seguridad hasta dónde puede llegar; es resto es idiocia de la que el PP, está haciendo gala en exceso. Atención a Navegantes; y sobre todo que en Génova no olviden nunca, en su inconsciencia suicida, que no pueden malversar los votos de quienes con unas ilusiones legítimas, han confiado en niñatos que, por lo visto hasta el momento, no son merecedores de tal deferencia, tan solo se han visto engañados por la circunstancia de que no existen las listas abiertas; y los ineptos, tienen acceso a lugares inmerecidos que les pueden ocasionar más daño que beneficio. Por lo tanto, que tengan claro que quienes han fracasado han sido ellos y no sus votantes que bastante han hecho con salvarles de la vergüenza de perder las posibilidades de gobernar con todo a su favor. Lo más honrado es dimitir y marcharse a casa, con un pusilánime, ya tuvimos bastante.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/9/opinion/231663/atropellar-la-razon