Treinta años de autonomía para Andalucía

El pasado jueves, tuve la oportunidad de asistir como oyente, a una mesa redonda dentro de la Jornada Organizada por la Cátedra Rafael Escudero, con el título “30 años de cambios”.
Mi asistencia fue en calidad de alumno de 1º de grado de Derecho, por lo que mi perspectiva sobre lo acontecido entiendo que debo de versarla sobre ello. Esto no es óbice para indicar mi perplejidad ante algunas expresiones vertidas por algunos de los intervinientes en la misma, al igual que mi crítica (constructiva) sobre lo que entiendo debe de ser una mesa redonda, en la que el debate y la opiniones contradictorias es el principio fundamental de la misma, circunstancias que en la celebrada el jueves, quedó desde mi modesto punto de vista muy pobre.
Paso a exponerte mi parecer sobre lo acontecido y en particular sobre su exposición, a la que quiero de antemano elogiar por su brillantez, aunque de la misma pueda discrepar en cuestiones muy puntuales. De tu análisis sobre nuestros 30 años de Autonomía poco hay que comentar. Fue real y fundamentada. Números sobre realidades tangibles en nuestro entorno social, que remitiéndome a lo que mi padre me enseñó: “Es del género tonto negar una evidencia”, no voy ni a comentar, con la salvedad de que para un técnico como yo, 2 más 2 siempre son 4. Pero desde un punto de vista jurídico político, da lugar a la interpretación siempre posible y puede ser que no sean 4.
Fundamentaste explícitamente tu exposición en dos aspectos de los diversos principios fundamentales de nuestra carta magna, “La Constitución”, tal y como conocemos, “Estado del Bienestar”. En efecto, nuestra sociedad andaluza ha cambiado y mucho, diversos son los ejemplos que expusiste como albojense, circunstancias que me agradaron, en tu sentir de arraigo natural. Pero en este mismo sentido y en parte siguiendo el hilo de los fundamentos de tu intervención, me pregunto: ¿Qué ha pasado con la autovía del Almanzora?. El Estado de Bienestar, debe de acompañarse de otros aspectos, tales como comunicaciones, económicos, culturales, etc...
De las conclusiones de tu intervención, y como almeriense cuestiono la actuación seguida durante este periodo por los políticos que han dirigido nuestra Constitucional Autonomía, y más con el modo de alcanzar ésta, pues no debemos de obviar aquella consulta popular que en su día se realizó y el resultado que dimanó. En ella ejercí por 1ª vez mi derecho constitucional de votar. Derecho que más del 90% de los asistentes a la indicada mesa ejercerán el próximo día 25 de marzo también por 1ª vez.
Andalucía ha cambiado, pero no su clase política, como bien indicabas, con el añadido de la falta de poder de Almería en la gestión de Andalucía.
Para finalizar felicitarte por tu exposición y dejar en el aire una serie de interrogantes acontecidos en los últimos 30 años que deduje de la misma: ¿Debemos de adoptar un posicionamiento crítico sobre el poder político de nuestra Andalucía? ¿Se ha seguido una política autonómica correcta en el sentido de haber podido ser mejorada? ¿Sigue siendo real ese centralismo sevillano tantas veces esgrimido y potenciado?¿Es correcta la política seguida con los emprendedores y restringida con ese exceso de legislación autonómica? Andalucía lleva 30 años de cambios sociales, pero no políticos. Nuestra tierra necesita esa renovación, que nos coloque en el lugar que nos merecemos.