Derechos

Sus ojos destellantes y abiertos de par en par divisando la bahía mostraban la importancia del momento. La brisa de altamar acariciaba por primera vez su cara inocente, propia de un menor. Muchos eran los sueños que hoy comenzarían a materializarse, tantos como seres queridos dejados atrás. Pero aquella mirada con gesto inocente y radiante se tornó gris, el patrón de la patera les hizo saltar a más de un centenar de migrantes en aguas abderitanas hace una semana, cobrándose dos vidas.

Cuando el menor logró alcanzar la orilla, donde sus iguales juegan sin preocupaciones y cuyo principal sueño es conseguir la última consola del mercado, encontró gente que le desprecia por no ser español, pero también encontró a mucha otra que lo acoge, sin ser migrantes, porque no hay que pertenecer a un colectivo para ayudarlo. Nos pasa también con las personas LGTBI, con las mujeres, con las personas en riesgo de exclusión o pobreza extrema, …, es de justicia ayudar a estos colectivos.

¿Cuántos enemigos de aquel menor y sus compatriotas trabajarán como ellos, esclavizados en los invernaderos que tanta riqueza nos da? Más allá de embarrar, ¿qué dirían las derechas, y cómo piensan contribuir al desarrollo de sus pueblos? ¿Qué están dispuestas a hacer para acabar con la tiranía de sus gobernantes?

Ramsey Clark, un ex fiscal general de los EEUU, dijo “Un derecho no es algo que alguien te da; es algo que nadie te puede quitar”, pero vemos cómo las derechas están dispuestas a lo contrario, con censura cultural, despreciando al colectivo LGTBI o señalando migrantes como a aquel menor en la costa almeriense como uno de nuestros problemas.

¿Vas a permitir que las derechas nos quiten nuestros derechos?