Números

Igual hoy no entenderíamos la Matemática, y el mundo que nos rodea, sin la aportación de Pitágoras, quien se centró en los principios matemáticos, el triángulo y el concepto de número, a los que atribuía propiedades de personalidad, de género o de belleza, influyendo en filosofos como Platón, conectado con el Islam, el Cristianismo y el Judaísmo.

Y decía “Ayuda a tus semejantes a levantar su carga, pero no te consideres obligado a llevársela”, lo que nos lleva a reflexionar, por ejemplo, en lo cercano, cuando el Ayuntamiento de Almería estudia subir el precio de un bien imprescindible, el agua, a pesar de decir que no lo harían y de que venden bajadas de impuestos (para quienes más tienen), demuestra que la alcaldesa no quiere llevar la carga de tantas familias empobrecidas. Y en lo lejano, que nos toca el alma como si ocurriera en nuestros barrios, debemos oponernos a cualquier ataque terrorista, y ayudar a levantar las cargas del pueblo israelí, pero sin obligarnos a llevarlas, si éstas vulneran derechos humanos o ignoran las reglas de la guerra o democráticas.

Son cuatro grandes grupos religiosos en Israel, judíos, musulmanes, cristianos y otras minorías, como cuatro son los primeros enteros que suman un número muy valorado por los pitagóricos, el 10, que pueden disponerse como triángulo perfecto, la tetraktys: 1 (lo divino), 2 (origen de la pareja), 3 (niveles del mundo: celeste, terrestre e infernal), y 4, como los elementos básicos: tierra, aire, fuego y agua, la inexistente en muchas zonas de Gaza y que tantos niños buscan, aunque no sea potable. Ahí sí tendríamos que llevar sus cargas, y dejar de contar cómplices muertes, como si de números pitagóricos se trataran.