Por los cuernos de Satán! Prostitución y enseñanza juntas. Entre las extrañas modalidades laborales que está creando la crisis destaca la oferta de una empresa que debe ser del demonio ofreciendo cursos de especialización a las jóvenes universitarias para ser putas. Se garantiza, faltaría más, un puesto de trabajo fijo, buena clientela y mejor remuneración. Se sabe ya de antiguo que el comercio de la carne estaba mal, y no por cuestiones morales sino sanitarias, pero esto de ir a salvar a las clases populares que, tras muchos esfuerzos habían conseguido ir a la universidad, es completamente nuevo, vamos una providencia de los chulos del gran dinero para salvar a las familias diezmadas por el ajuste y el déficit. Nos habían dicho que sin educación no nos poníamos nunca a la altura de las naciones desarrolladas. Nos convencieron de que había que investigar porque un pueblo sin ciencia lo fía todo a la lotería. Bien, pues cuando ya teníamos muchas universidades y una clase media bastante apañada en esto del saber, viene el ajuste y ahora nos dicen que hay que ahorrar profesores y cerrar clases. No me extraña, por tanto, que el 55% de los jóvenes estén parados y que a las niñas en edad de merecer haya que facilitarle un trabajo en la prostitución. Este viejo desdén por la enseñanza pública por parte de los que piden dinero al Estado para financiar la privada, conduce a la larga a aberraciones y aquí es donde se engendra esa tremenda injusticia de hacernos pagar a los contribuyentes los desafueros de los grandes financieros. No sé cómo llevarán ustedes eso de Bankia pero antes nos pedían impuestos para cosas más dignas. Hay ponerse en la situación de las que no tienen más remedio que salir a la calle a ganarse un sueldecito ante la vergüenza pública.
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