Tres proyectos que cambiarán Almería

Sesenta minutos con María Vázquez dan para mucho. La intensidad que pone en lo que proyecta solo es equiparable a la pasión con la que lo expresa. El jueves compartimos reflexiones. Fue en La Dulce Alianza y mientras el presente de Almería pasaba por las aceras del Paseo, la primera alcaldesa en toda su historia-han tenido que pasar más de mil años para que una mujer dirija la ciudad-recorrió algunos de los proyectos que acabarán diseñando el futuro. Las líneas que siguen es una transcripción libre de una conversación en la que el río de las ideas no dejó espacio al estanque de la ideología.

¿Que qué vamos a hacer con el Paseo? Dentro de unos días vamos a hacer público el proyecto y, después de todos los trámites de licitación y adjudicación, espero que para principios del año próximo comiencen las obras. Durarán ocho o diez meses, pero nuestra meta es terminarlas para la Navidad del 2025. ¿Cómo va a ser? Peatonal. Contará con una calzada única, con un pavimento luminoso, con espacios verdes, con plazas que obligarán a replantar- no a quitar, a replantar eh- ficus en el mismo espacio que ahora ocupan para dar más vistosidad a algunos de edificios tan bellos como El Casino, La casa de la Bomba, en fin, un nuevo Paseo que se convierta en un espacio atractivo para el comercio, la hostelería y el ocio.

¿Que si estará cerrado al tráfico, me preguntas? Si, pero compatibilizando la peatonalización y el paso de vehículos mediante mecanismos regulatorios y técnicos para comercios, residentes y bus urbano.

Vamos, como la Avenida Constitución en Sevilla, donde solo pueden pasar residentes, el tranvía y taxis.

Si, algo así, pero con árboles y plazas, jaja. Y una de las cosas que vamos a hacer es eliminar las escaleras que separan la plaza del Educador con el antiguo edificio de Correos. Todo estará unido a la misma altura, solo habrá un pequeño desnivel. Pero no hablemos mas del Paseo que solo faltan unos días para presentar todas las características del proyecto

Y del Paseo al Puerto.

Bueno, ahí tengo a Rosario (Soto, presidenta del Puerto) que no para; ya la conoces. Estamos coordinadas las dos administraciones y el proyecto Puerto-Ciudad contempla unir La Rambla y Reina Regente con el Puerto en un espacio único. Va a ser espectacular. Ah, y te cuento otra cosa: tengo el sueño de soterrar la Vía Parque, desde reina Regente hasta la rotonda de Pescadería. Este es un proyecto complejo, ya lo sé, soy consciente de las dificultades económicas y técnicas que tiene, pero es -bueno, sería- un diseño que uniría el Parque Nicolás Salmerón con el Puerto creando un espacio verde y lúdico sin tráfico. Va a ser espectacular. Recuperar y ampliar un espacio tan singular de la ciudad, figúrate. ¿Que no es fácil?, claro, pero ningún gran proyecto en ninguna ciudad ha sido fácil y se han hecho. ¿Por qué no aquí?

Lo que cuesta trabajo imaginar es cómo revitalizar el Casco Histórico.

Es una tarea compleja, pero en ello estamos. El Parque de la Hoya ha quedado espectacular, hay que darle uso, trasladar las gacelas a otro hábitat de similares características y ampliar el uso de La Hoya a todo tipo de actividades atractivas para los ciudadanos sin causar ninguna perturbación. Ahora estamos viendo la posibilidad de poner una escalera mecánica que una el Parque con el cerro de San Cristóbal. En algunas ciudades ya lo hay entre espacios similares y aquí habría que hacerlo.

Pero eso amplia los atractivos para ir de visita, pero no va a salvar a esa parte de Almería de la decadencia que vive desde hace decenios.

Claro, claro. Hay que hacer que la gente, sobre todo la gente joven, vea atractivo vivir allí. Cómo hacerlo. Tomando decisiones que incentiven ese atractivo. Desde facilitades al acceso a la vivienda a mejorar los servicios o embellecer sus calles. Todo será poco, pero hay que hacerlo y cuanto antes.

Como también sería importante- y ahora nos vamos a otra parte de la ciudad- que el espacio de la estación del AVE no se viera sometido a la construcción de más edificios de 15 plantas que no aportan nada a un espacio que debe ser un lugar singular de la ciudad.

En fin, Pedro, que hay trabajo por delante y no vamos a parar.

Tras el encuentro y ya de regreso a la redacción contemplo las obras iniciales del soterramiento y pienso en el espectacular desarrollo de la Vega de Acá y como las ciudades son espacios en continuo movimiento, proyectos irremediablemente abiertos en los que en su ´escritura´ solo existe el punto y seguido porque el punto y final supondría el estancamiento. Un territorio compartido en el que quienes lo habitan deben aspirar a ser lluvia, nunca sólo a ver llover. El futuro de Almería depende de todos y, porque nadie es imprescindible, todos somos necesarios. Y ahora, mas que nunca. Que desde la alcaldesa al último vecino que acaba de llegar, no falte a la cita.