Un premio para ‘Juan Camión’

Juan Cano Cano, natural de Antas, no nació en la Bola Azul; Juan nació en la cabina de un camión hace cerca de 60 años y desde entonces no se ha bajado de él; Juan no tiene ojos nada más que para sus camiones, para su carrocería, para sus neumáticos, para que estén siempre a punto como un reloj suizo, porque Juan es un poco suizo y ha crecido en los negocios con  precisión helvética. Si fueran seres vivos -los camiones digo- Juan los alimentaría como a un caballo y los taparía por la noche con un cobertor para que no pasaran frío. Juan vive para los camiones, para Antas, para el Almería y para su familia. Porque a pesar de ser -la de Juan- una de las cinco primeras empresas de transporte de Andalucía, con 650 empleados y diversificando al sector de la naranja, su empresa, Transintercano, sigue siendo tan familiar como un café con leche con tostadas en La Era Lugar. Juan es así: grande pero pequeño a un tiempo, con cara de no haber roto nunca un plato, aunque haya revolucionado el transporte provincial. 

“Tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia” (San Mateo). Él es Juan, y sobre un camión ha edificado el andamio de una empresa de 350 camiones que van y vienen por las carreteras de toda Europa con la facilidad con la que un antuso va a y viene de Vera. Juan Cano está de enhorabuena: acaba de recibir el Premio Familia-Empresa 2024 que otorga la acreditada Escuela de Negocios de San Telmo. Almería es un cañón en el sector del transporte por carretera, a la cabeza de España. Ahí están todos esos nombres tan conocidos y reconocidos -J.Carrión, Isabel Alonso, El Junza, Belzunces, Pérez Casquet o Fríoejido, que han hecho realidad, en comandita con el agricultor y las comercializadoras- el milagro de exportar casi tres millones de kilos anuales de frutas y hortalizas por valor de 3.850 millones. Queda por saber cómo se adaptará este pujante sector a la competencia de los raíles del AVE, pero todo apunta a que pueden ser negocios sinérgicos. Juan ‘Camión’ Cano sabe mucho de eso: lleva toda la vida adaptándose a lo que venga.